El preparador de porteros de Fútbol Consultants, Pablo Quesada, fue sancionado con dos años de suspensión por agredir al árbitro asistente José Ovidio Solórzano.
La situación se presentó el domingo en el juego de la Liga de Ascenso que disputaban Sporting FC y Fútbol Consultants en el Estadio Ernesto Rohrmoser de Pavas.
Quesada fue expulsado en el minuto 75 del partido por abandonar el área técnica para protestar de forma airada, utilizando lenguaje soez y vulgar contra Solórzano.
Cuando Quesada vio la tarjeta roja se lanzó “violentamente contra el árbitro asistente, golpeándolo en el rostro, lo que lo dejó algunos minutos desorientado y mareado en el suelo. Solórzano, aún en el suelo recibió una patada en la espalda por parte de Quesada”, explicó la Fedefútbol en un comunicado de prensa.
“Por estos motivos el Tribunal (Disciplinario) decidió sancionar con dos años a Quesada, los cuales serán contados a partir de la comunicación de este acuerdo. Dicho castigo está fundamentado en que los hechos realizados por Pablo Quesada fueron accionados mediante el uso de la fuerza desmedida y excesiva”, citó la resolución.
En una entrevista con La Nación, el línea anunció que pondrá una denuncia penal contra su agresor y que en los días posteriores se sentía muy mareado y con dificultades para hacer su trabajo como vendedor de lotería.
“Hugo Cruz lo expulsa, yo me ubico en la banda frente al campo de juego, Cruz está varios metros delante mío y solo siento un golpazo, nada más. Lo sentí fuerte, yo me quise sostener de pie, pero qué va, no pude y me fui para el suelo. Me desvanecí por completo”, explicó Solórzano.
La Nación también había conversado con Pablo Quesada, quien se mostró muy arrepentido por haber agredido al árbitro asistente.
“No me siento muy bien porque acaba de pasar, lo que puedo decirle es que no hay justificación para el hecho que cometí, fue un acto que no se debe hacer”, explicó Quesada.