La presencia de ticos en los Timbers de Portland se ha hecho habitual. En este momento pertenecen a esa planilla Julio Cascante y Marvin Loría, pero anteriormente estuvieron David Guzmán y Roy Miller. Este último jugador mantiene una relación que va más allá del fútbol.
Miller estuvo en la ciudad de Oregon durante dos años y medio y en ese tiempo él y su familia crearon lazos que mantienen.
Eso queda en evidencia cuando el conjunto de la MLS visita Costa Rica, como sucede estos días. Por segundo año consecutivo está en el país haciendo su pretemporada.
Realizan sus entrenamientos en el Proyecto Gol y tendrán tres fogueos: el sábado ante Saprissa, el miércoles ante Grecia y finalmente el sábado 8 de febrero se miden con Herediano.
Pero también tienen espacio para otras actividades, más allá de las meramente futbolísticas. Una de esas se desarrolló este jueves tras la práctica matutina y ahí estuvo Laura Valverde, la esposa de Roy Miller.
El equipo compartió con 200 niños de escasos recursos, la mayoría de zonas de San José y otros de Quepos. Los pequeños presenciaron el entrenamiento, se tomaron fotografías con los futbolistas y recibieron un bulto con útiles escolares.
Durante toda la mañana ahí estuvo Valverde, colaborando con la actividad a petición de los Timbers. Ella, Miller y sus hijos tienen más de seis meses viviendo en Costa Rica, pero el lazo con los estadounidenses sigue intacto.
"El tiempo que estuvimos allá hicimos muy buenos amigos, contactos.. luego nos vinimos y quedó la buena relación. Cuando el equipo viene tratan de involucrarnos para seguir ligadas al equipo y tratar de ayudar en ciertas cosas que uno como costarricense conoce más", contó Valverde.
Ella estuvo coordinando la actividad junto a Kristel Wissel, la vicepresidenta de asuntos comunitarios del equipo.
"Laura y yo somos amigas y también de Roy, mantenemos el contacto. Además es parte de la cultura de nuestro club involucrarse con la comunidad, no solo es fútbol, va más allá de eso", explicó Wissel.
Valverde asegura sentirse en familia, pues la amistad con Wissel, el chef del equipo y gran parte del plantel sigue intacta.
“Muy contenta de ver personas que uno quiere. La primera vez que vinieron teníamos cierta incertidumbre de si les iba a gustar y les encantó estar aquí. Les encantó el clima, la comida y pienso que algo de eso tuvo que haber llevado a que volvieran”.
Tanto ella como Roy se dejaron un recuerdo muy grato de Portland como ciudad, pues a pesar que la mayoría de sus años en Estados Unidos los pasaron en Nueva York y Nueva Jersey, Portland los conquistó.
“Es espectacular para criar familia, para todo, es lo mejor”, agregó Valverde, quien hace poco obtuvo la nacionalidad costarricense, al igual que Miller y uno de sus tres hijos, quien nació en Noruega y no la tenía.
Las actividades de los Timbers en el país continuarán este viernes, cuando visiten a la organización sin fines de lucro Fundación Club Sport La Libertad en el estadio Ernesto Rohrmoser, en Pavas. Ahí también estará Julio Cascante y su equipo donará balones.
El jugador fue la sensación entre los niños este jueves, pues la mayoría quería tomarse una fotografía con él.
“Es una experiencia muy bonita estar aquí otra vez con el equipo, ver a mis compañeros aquí, algunos no conocían, otros habían venido antes. Y después compartir con los chicos es algo para apreciar. Es muy lindo que se acuerden de mí, me motiva muchísimo”, expresó.