Belén. En el fútbol hay ocasiones en el que el marcador es engañoso y en el partido de ayer lo fue, porque el 1-3 con el que Carmelita venció a Belén no fue justo.
Pero no se confunda con lo del marcador injusto; no se trata de que Belén mereció ganar; más bien Carmelita debió ganar por una diferencia mayor de goles, ¡mereció golear!
La diferencia de tres goles fue poco premio para un equipo inteligente, astuto, ordenado y que viene haciendo las cosas bien; a la vez, bastante piadoso con el otro equipo, tímido, débil y con pocas ideas.
La realidad de lo que pasó ayer en el campo de juego, la escribieron los mismos jugadores belemitas en el campo, y la resumió bien al final del cotejo su mismo técnico -Vinicio Alvarado-, cuando dijo: “No hay una sola excusa, fuimos completamente superados por el rival”.
A pesar de que los heredianos eran locales, eso nunca pesó en un estadio vacío y donde los gritos que más se escuchaban eran de los pocos aficionados visitantes.
Carmelita ni lento ni perezoso aprovechó la ocasión y a los nueve minutos ya estaba al frente.
Un excelente centro de primera intención, de Carlos Castro, encontró en el área a Mario Camacho, quien no dudó en lanzarse de palomita para anotar un golazo.
Belén intentó salir del coma en el que estaba y aunque encontró el empate momentáneo, fue por una pena máxima, que dejó dudas por lo riguroso de su señalización.
Allan Duarte transitaba un balón por la banda izquierda e ingresando al área remató al cuerpo de Sebastián Matus, acción que Ricardo Cerdas decretó como penal.
El encargado de traducir de cobro a gol fue Ricardo Blanco, uno de los pocos belemitas que merecen buena nota, por el sacrificio y la entrega puesta en el terreno.
Otro de los rescatables fue Erick Sánchez; el guardameta local fue el único culpable de que los carmelos no salieran del Polideportivo con una goleada en la espalda.
Además de varias y buenas intervenciones, el exguardameta limonense le detuvo un penal a Mario Camacho, al minuto 76.
Empero, al que no logró detener el portero belemita fue a Carlos Clarck, quien llegó con la pólvora encendida y marcó un doblete en la que fue su casa el torneo anterior.
La primera anotación la selló con su pie derecho al 38', después de una excelente pared que le devolvió Camacho, y la segunda con su cabeza al 64', luego de un milimétrico centro de José Adrián Marrero.
Belén intentó reaccionar, pero irónicamente su mayor pecado lo cometía al atacar, porque dejaba espacios que los verdolagas agradecían con contragolpes.
El tiempo caducó, así como las emociones de un cotejo que solo tuvo un dueño, el cual no recogió un mejor botín, pese a merecerlo. Carmelita perdonó a Belén de una goleada, aunque se afianza en la segunda posición de la general.
Belén 1
Titulares: Erick Sánchez, 6; Rigo Ramírez 5, José Carlos Chan 4, Daniel Arce 5, Josep Mora 5, Carlos Acosta 4, Ricardo Blanco 6, Allan Duarte 5, José Daniel Varela 6, Sergio Sánchez 5, Christian Carrillo 5. D. T.: Vinicio Alvarado.
Cambios: Jean Scott 5 (Duarte, 58’); Kendrick Pinnock 5 (Varela, 67’); Daniel Ramírez 5 (S. Sánchez, 67’).
Carmelita 3
Titulares: Ronny Fernández 7; Sebastián Matus 7, Bryan Orue 7, Fabricio Chavarría 7, Carlos Castro 7, José Adrián Marrero 7, Alonso Chavarría 7, José Macotelo 7, Brian Solórzano 7, Mario Camacho 7, Carlos Clarck 8. D. T.: Guilherme Farinha.
Cambios: Giovannie Cantillano 7 (Clarck, 75’); Franklin Chacón -- (Camacho, 82’); Berny Solórzano -- (Marrero, 86’).
Goles: 0-1 (9’): Mario Camacho (Castro). 1-1 (33’): Ricardo Blanco (Penal). 1-2 (38’): Carlos Clarck (Camacho). 1-3 (64’): Carlos Clark,( Marrero). Árbitro: Ricardo Cerdas, 5. Estadio: Polideportivo de Belén. 11:30 a. m.