Baja de categoría un emblema del balompié sudamericano, enriquecido durante 110 años por estrellas de la talla de Alfredo Di Stéfano, Adolfo Pedernera, José Manuel Moreno, Amadeo Carrizo, Norberto Alonso y los uruguayos Walter Gómez y Enzo Francescoli, entre otros.
El descenso de un “grande” provoca estupor en Argentina y el impacto negativo se potencia al desaparecer del calendario deportivo el clásico con el Boca Juniors, considerado uno de los espectáculos más atrayentes para aficionados de todo el mundo.
River Plate fue fundado en el sureño barrio porteño de La Boca el 25 de mayo de 1901. El club se instaló durante algunos años en La Recoleta y desde 1938, cuando inauguró el estadio Monumental, en la zona Belgrano, en el norte de la ciudad.
El River Plate es considerado uno de los cinco grandes del fútbol argentino, con su histórico rival, Boca Juniors, San Lorenzo, Racing e Independiente.
La Federación Internacional de Historia y Estadística del Futbol (IFFHS) lo eligió cuatro veces como el mejor equipo del planeta, en un ranking mensual elaborado a partir del año 2000.
En la clasificación de todos los tiempos, según este organismo, ocupa la novena posición mundial detrás de FC Barcelona, Manchester United, Real Madrid, Juventus, AC Milan, Inter, Bayern Múnich y Arsenal de Inglaterra.
De su cantera surgieron numerosos futbolistas de extensa trayectoria en Europa, como Enrique Omar Sívori, Ramón Díaz y Santiago Solari, y los vigentes Gonzalo Higuaín, Javier Mascherano, Hernán Crespo, Javier Saviola y Pablo Aimar. También brillaron en sus filas Mario Alberto Kempes, Ubaldo Fillol, Enrique Wolff y Daniel Passarella, actual presidente del club.
El River descendió justo el día en el que se cumplen 15 años de su última conquista de la Copa Libertadores de América.