Lee Kyung-Hwan, de 24 años, que jugaba de centrocampista en el Suwon Samsung Bluewings y militó con anterioridad en el Daejeon Citizen, fue sancionado el año pasado después de admitir su implicación en una red ilegal de amaño de partidos, cuyo desmantelamiento se saldó con 57 personas detenidas y juzgadas.
El jugador fue encontrado gravemente herido en la parte inferior de un edificio en la localidad de Incheon, cerca de la capital, Seúl, y murió durante su traslado al hospital, detallaron fuentes policiales a AFP.
Este es el tercer suicidio que se produce a raíz del escándalo de partidos amañados en Corea del Sur, tras los cometidos por un jugador de Tercera División y un exentrenador.