Costa Rica ha tenido en los últimos 15 años un período de estancamiento en el nivel de vida de sus habitantes. Como se aprecia en el cuadro 1, el crecimiento del PIB por habitante fue de apenas el 0,3 por ciento. En dicho cuadro se ve también con absoluta claridad que el aumento de la producción de Costa Rica es inversamente proporcional al porcentaje del gasto público respecto al PIB. En síntesis, a mayor tamaño del sector público respecto al tamaño de la producción nacional, menor aumento del producto interno bruto.
Si a este cuadro agregamos el ciclo político del déficit que también ha estado presente en los últimos 15 años, como se aprecia en el gráfico, vemos que el exceso de gasto respecto a sus ingresos en el gobierno ha sido una variable de gran inestabilidad económica y social.
Sostengo que Ruth Richardson --quien fue la ministra de Hacienda que consolidó la reforma del Estado en Nueva Zelanda-- lleva razón cuando afirma que la versión neozelandesa de las garantías económicas es una de las razones fundamentales del éxito económico obtenido por dicho país.
Nueva Zelanda tenía dos décadas de estancamiento económico. En 1984 emprendió un vigoroso programa de reforma del Estado. El "Fiscal Responsability Act" estableció la obligación de eliminar el gasto deficitario del sector público.
Nueva Zelanda demostró que las teorías de la vida fácil, de gastar más de la cuenta en el sector público están equivocadas, como se aprecia en el cuadro 2. Sostengo que gastar más de lo que nos ingresa es irresponsable en la vida privada y en la pública. Gastar más nos ha dado una deuda excesiva del gobierno que requiere que de cada ¢100 del presupuesto gubernamental, ¢35 se destinen al pago de intereses.
Ha llegado la hora de poner la casa en orden. Desde esta página quiero destacar la aprobación de la reforma constitucional que conocemos como "Garantías Económicas". Felicito a los diputados de los partidos que hicieron posible su aprobación. El liderazgo del presidente José María Figueres hizo posible que este proyecto --al que se le había declarado su muerte-- reviviera. En el siglo XXI, las Garantías Económicas nos asegurarán un país de mediano desarrollo con alta calidad de vida.
La austeridad del sector público será una norma constante. El ciclo político del déficit del sector público acabará para siempre. ¡Enhorabuena! (*) Ministro de la Reforma del Estado