El pasado 13 de febrero, en la sección Opinión del periódico LaNación, bajo el título “Vacilón Institucional” , don Homer Dávila G., representante de la firma GEO GROUP RESOURCES & PROYECTS S. A., nos hace un recuento de las cosas que pasaron en Japdeva en la tramitación de una contratación. Antes que nada, le expreso mis sinceras disculpas por las molestias ocasionadas, en nombre propio y de nuestra institución.
Efectivamente, a esta empresa se le adjudicó un contrato por un monto de ¢2 450 500,00, para un proyecto específico para la regeneración de la playa de los Baños, ubicada en el centro de Limón. El objetivo de este proyecto es darle a la ciudad de Limón una playa artificial de 350 m con capacidad para 2000 personas. Se embellece la ciudad y damos uso lúdico al sector.
Rescate de la playa. Es importante señalar que, producto de estudios realizados por este servidor, del proyecto de graduación para la obtención del máster en Ciencias y Tecnología Marinas de la Universidad de Cantabria, España, se diseñó esta propuesta con el objetivo de rescatar una playa que perdió su atractivo por la contaminación sanitaria y el terremoto de Limón de 1991. Es evidente el compromiso de mi parte y la importancia de llevarlo a cabo, en razón de ser autor de esta obra.
Es cierto, y lo admito, se falló en la comunicación con don Homer y eso hay que reconocerlo. Sin embargo, deseo expresar que la Dirección de Ingeniería está comprometida con la realización de todos los proyectos asignados, y aunque este es parte de una colaboración con el proyecto Limón Ciudad Puerto, siempre procuramos dar toda nuestra capacidad en todo sentido.
Deseo manifestarle que contamos con personal con amplios conocimientos y de experiencia en la ingeniería portuaria, operaciones portuarias e ingeniería mecánica portuaria, quienes han venido desarrollando los proyectos en busca de mejores condiciones operativas de los Puertos de Limón/Moín, como la terminal multipropósito de Moín, por un monto de $10,4 millones, la terminal de cruceros y Roll On Roll Off en Limón, por un monto de $8 millones, la compra de grúa puente para contenedores, por $6 millones, grúas de patio para contenedores, por ¢617 millones, remolcador marino para empuje de las embarcaciones, por ¢691 millones, todo ello en la primera mitad de la década pasada; pero más recientemente, entre el 2009 y 2010, esta Dirección ha promovido, adjudicado y supervisado proyectos por el orden de ¢7517 millones, dentro de los cuales se destaca el dragado de los puertos de Limón y de Moín, que aumentó la capacidad del calado de los barcos que llegan a estos puertos.
Deseo expresarle también a don Homer que todos estos proyectos se han realizado y supervisado bajo las especificaciones técnicas del equipo de la Dirección de Ingeniería. Podemos seguir citando una gran cantidad de proyectos, como el esfuerzo realizado para contar con el Plan Maestro para los Puertos de Limón/Moín, el cual ha definido el norte de este país en materia portuaria en el Caribe costarricense para los próximos 25 años, y que ha servido de base para la licitación de la terminal de contenedores de Moín y que colocará a este país, nuevamente dentro de los mejores puertos de Latinoamérica.
Falla en comunicación. Soy un profesional diligente y, ante tantos retos de proyectos simultáneos, he cometido el error de querer cumplir con todo al mismo tiempo, y eso ha dado como resultado una falla en la comunicación para darle toda mi atención a un asunto tan importante como el contrato con su empresa. Todos los contratos son igualmente importantes.
Dado que no podía asistir a la reunión programada, entonces giré instrucciones a mis subalternos para que fuera atendido el Sr. Dávila.
Se le recibieron los documentos con sus solicitudes de información, que son normales en el trámite para que el proyecto pueda ingresar a la Setena y crear el expediente administrativo.
Luego lo atendí personalmente, y me informó que ya había realizado la inspección, solo quedaba entonces brindarle la información pertinente.
Y es aquí donde lamentablemente, parte de la información requerida no estaba a tiempo (características del equipo especial, detalles del dragado, condiciones del buque draga, estudios batimétricos, etc.), a pesar de nuestros esfuerzos, nuevamente falló la comunicación oportuna, dado el exceso de trabajo en mi oficina, que en definitiva no disculpa las acciones, pero deseo al menos apelar a la comprensión de su parte.
El contrato no se encuentra perdido, dado que en el presupuesto 2011 ya se han realizado las modificaciones para dotarlo del contenido económico, al igual que otros contratos que están pendientes del 2010.
Deseo que con estas explicaciones de mi parte, pueda al menos mitigar su frustración por las instituciones del Estado y la generalidad de los funcionarios públicos, que en mi caso y muchos de nosotros estemos comprometidos con realizar la tarea de la manera más pronta y cumplida, pero que a veces las emergencias nos ponen en apuros con nuestras prioridades.