Casi cuatro décadas de trabajo hicieron de Luis Carlos Vásquez un director que habla claro y que no le preocupa experimentar con sus espectáculos, a pesar de las críticas. Tampoco tiene reparo en aceptar que, aunque a su nuevo espectáculo le sobrarán las críticas, tendrá público abundante en su temporada.
En una entrevista con
Como un espectáculo musical.
Ha sido complicado; me parece que tiene que empezar a darse una oportunidad y apertura a esta posibilidad; no es novedoso en otras partes, pero esperemos que en Costa Rica sí lo sea.
Por ejemplo, para la parte de los siete pecados me inspiro en El Bosco. También tiene inspiraciones contemporáneas, como los trajes de las tentaciones o los tatuajes. Yo lo veo como un gran cómic musical para adultos.
Los directores contemporáneos, con el tiempo, se vuelven más un artista conceptual. Creo que a nivel de imágenes la obra es muy conceptual.
Creo que (el colorido y estilo de los personajes) ayuda a transmitir el mensaje.
Creo que no, porque son parte del cuadro, de la composición.
No. Por ejemplo, el desfile de moda (una escena de la obra) critica el boato de la iglesia Católica. Creo que es muy crítica a la religión.
Con el tiempo, puedo mencionar cuáles obras no estuvieron bien y cuales sí. Cuando uno va a estrenar una obra, uno no es lo suficientemente crítico; con el tiempo podría encontrarle muchos defectos, pero hoy puedo decir que no sé.
Las críticas que me aportan las acepto; lamentablemente, no he tenido muchas. Las que considero que son ataques personales, me las paso por alto.
Definitivamente las prefiero pasar por alto, porque son personales, no artísticas.
Como te dije el año pasado: ‘Nos produce más asistencia de público cuando habla (...)’. Esta obra astrológicamente va a tener malas críticas, pero mucho público; casi le podría escribir la crítica.
¡Qué hablen! Prefiero eso a que la gente te ignore.