Superman se caracteriza por preocuparse por el bienestar de la humanidad, por tratar de salvar al mundo en muchas oportunidades, pero en la historieta número 792 de Action Comics titulada ¡Desaparecido!, el Hombre de Acero demuestra un cariño muy especial por un costarricense de unos 50 años.
Valentín Reyes es el vendedor de periódicos que tiene su puesto en las afueras del diario El Planeta y todos los días, Clark Kent conversa con el costarricense sobre las proezas que realiza Superman.
Reyes es un hombre bueno, así lo califica Kent en varias ocasiones durante la historia, sin embargo este hombre guarda un secreto que lo metería en problemas.
El pregonero está apunto de ser abuelo, su hija Maribella está embarazada y esta noticia lo tiene muy feliz. Pero cierto día simplemente dejó de abrir su puesto de periódicos, Kent no lo vió durante varios días.
Preocupado por la ausencia de su amigo, Clark consulta con su Luisa Lane y le comenta la situación. Ante la preocupación del superhombre, la reportera decide ayudarlo a iniciar una búsqueda.
La pareja recorre el barrio de Reyes, habla con su hija y también con un hombre peligroso, quien niega haber tenido contacto con el tico.
Al final de la historia, Superman intenta obtener la verdad a su estilo, y aquél hombre de la mafia confiesa haber asesinado al pregonero por una serie de apuestas clandestinas en las que participaba.
Superman, fiel a sus valores rescata de un río el cuerpo sin vida de Reyes.
Para cerrar el capítulo, Lane redacta una nota en El Planeta en la que alaba la reacción de piedad que tuvo el Hombre de Acero ante la desaparición de su amigo.
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