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Hay cine que deja huella, rompe esquemas y marca derroteros de esperanza. Tras 20 años de letargo, el cine nicaragüense descubrió a
Fue hace 10 años cuando una francesa que reside en Nicaragua, Florence Jaugey, se puso a soñar y descubrió en Nicaragua algo que yacía en un baúl cerrado. El resultado fue sorprendente, alentador e histórico:
El 30 de diciembre del 2009, y luego de lucirse en varios festivales internacionales,
En su primer fin de semana en la cartelera nicaragüense, 9.500 espectadores fueron a ver
“Fue algo grandioso, impresionante. Los nicaragüenses se volcaron a ver el filme y salieron más que satisfechos con lo que vieron. Se reflejaron en ella”, dijo orgullosa Florence Jaugey, directora de la sonada película.
“Al final nos fueron a ver unas 22.000 personas, lo cual es un récord en un país donde existen solo 21 salas de cine para 5 millones de habitantes. Y eso que nos afectó la piratería, que según los expertos nos quitó un 30% de los ingresos”, agregó Jaugey.
A ese logro se suman nueve galardones internacionales, que le dan respaldo a este filme centroamericano, siendo el más importante en el Festival de Cine de Guadalajara, donde ganó como mejor ópera prima Iberoamericana, además del premio especial del jurado en el Festival de Málaga, España.
De hecho, y según datos de la historiadora María Lourdes Cortés,
Pero, lo realmente importante, es que esta seguidilla de premios es prueba de lo sobresaliente de este filme, que traspasó fronteras para dibujar en el extranjero lo que para Jaugey sucede en las calles y la vida cotidiana de Nicaragua.
En efecto, la cinta es un retrato social desde el punto de vista de la juventud nicaragüense, según lo confirmó su creadora.
“Lamentablemente los jóvenes casi no tienen oportunidades, pero a pesar de ello no se vencen con facilidad. Tienen coraje. Eso lo quise plasmar allí”, indicó Jaugey.
Sin embargo, la Yuma quiere cumplir su sueño y llegar alto con el poder de sus puños.
El amor encontrará a la Yuma en la cara de un periodista, pero “la desigualdad los convierte en luchadores en esquinas opuestas, de una Nicaragua dividida en estratos violentamente contrastados”, según describe el sitio la higuera.netlahiguera.net.
“No soy actriz. Sigo siendo una muchacha de barrio”, dijo Blanco, hace unos meses a la agencia de noticias AFP.
“Logré compenetrarme con la Yuma porque yo de chavala era muy rebelde, de opiniones fuertes, sigo siendo como la Yuma, arrecha”, agregó Blanco, quien vive en Italia y es profesora de danza.
Como es evidente, luego de dos décadas, Nicaragua le dio el impulso a una producción en el que el elenco actoral fue totalmente nica: policías de verdad, deportistas reales, aficionados a la actuación y uno que otro actor experimentado, unieron sus fuerzas para resucitar al cine de ese golpeado país.
“Sorprendentemente no fue difícil filmar la película en mi país, a pesar de tantos años sin hacerse este tipo de cine en Nicaragua”, afirmó la directora.
“La gente colaboró con la cinta muy emocionada, hubo un ángel que hizo que las cosas fluyeron. Lo que costó, eso sí, fue conseguir el dinero para filmar, lo cual me llevó años y años”, agregó.
“Es una cinta dura, pinta una realidad dura, pero también tiene mucho humor y mucho de esperanza, pues el personaje logra superarse a pesar de las circunstancias. Los nicaragüenses se ven en la película, pero pienso que cualquier persona en esa situación podría hacerlo”, explicó Jaugey.
Pero hay quienes van más allá; para María Lourdes Cortés, quien además de historiadora es la directora del fondo Cinergia (apoyó al filme económicamente), “
“Sé que afirmar eso es muy arriesgado (‘que es la más completa de Centroamérica’). Pero creo que
“Es una cinta normal, sin mucho aspaviento. Esta hablada con la jerga nica pero todos entienden lo que pasa, lo que sucede. El filme se disfruta. No solo es denuncia, no solo es entretenimiento, es una mezcla inteligente de todo”, agregó Cortés.
Luis Carcheri, director de la distribuidora de cine Romaly, y quien traerá
“Es cine latinoamericano, la cinta es una buena historia que puede suceder en cualquier país nuestro, por eso decidimos apoyarla y traerla al país”, dijo Carcheri.
“Es una cinta de denuncia y me pareció que es una bonita llamada de atención para visibilizar la forma en que se desarrollan muchas familias de escasos recursos”, agregó el empresario.
Cortes dijo que nunca pensó que
Es claro que en el cuadrilátero del cine regional,