En una residencia del Valle Central están celosamente guardadas 50 esferas y 47 monumentales esculturas del artista costarricense Jorge Jiménez Deredia.
Las obras llegaron por barco al país el 5 de octubre, cargadas en 17 contenedores. A pedido del artista, por seguridad no se revelará el sitio exacto donde permanecerán guardadas.
Ayer, solo se descargó una parte del total de obras, las cuales formaron parte de la exposición “Deredia a Roma”, que el artista presentó al mundo en Roma, Italia, el año pasado, junto a emblemáticos sitios históricos, como el Coliseo romano.
La aspiración de Jiménez Deredia es avanzar en un proyecto suyo llamado “La ruta de la paz”.
Como parte de ese proyecto, se planea exponer varias esculturas en Costa Rica y en países del continente americano, entre ellos, Canadá, Estados Unidos, México, Colombia, Perú, Chile y Argentina.
Serán obras contemporáneas inspiradas en símbolos de los pueblos indígenas. Según Jiménez Deredia, su idea es hacer un gran museo escultórico. Sin embargo, este proyecto aún no se concreta, por la cual se ignora dónde y cuándo podrán ser apreciadas por los ticos.
Mientras eso se decide, esferas y esculturas permanecerán en una propiedad privada, al aire libre.