29/11/11 Salas de operaciones y demas infraestructura en mal estado del Hospital Calderon Guardia algunas salas de operaciones se encuentran vacias por que al constrirse no se diseron con los requerimientos que debian (Adriana Araya)
Mientras casi todos los 19 quirófanos de uso diario del Calderón Guardia están en pésimas condiciones, ese hospital tiene otras cinco salas de operación nuevas que usa como bodegas para guardar equipos médicos.
Se trata de quirófanos ubicados en los pisos 2 y 3 de la torre norte del centro médico, construida hace tres años por la CCSS tras el fatal incendio de julio del 2005.
De las seis salas levantadas tras el siniestro, que costaron ¢3.000 millones, solo una funciona para su fin inicial, pues allí se realizan las cirugías cardíacas.
Las restantes cinco se han convertido en sitios de almacenamiento o, en el mejor de los casos, espacios para hacer endoscopias, procedimiento de diagnóstico, más simple que una cirugía.
Este diario verificó esas condiciones la semana anterior durante la huelga de anestesiólogos.
Precisamente, una de las condiciones de esos especialistas para levantar el movimiento era que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) se comprometiera a acondicionar los salones.
Esas mejoras son para todos los quirófanos del país, pero en el caso el Calderón Guardia se refieren tanto a reparaciones en los 19 quirófanos deteriorados, como al reacondicionamiento de las nuevas salas de operaciones.
Al no tener plomo en su estructura –dijo–, los quirófanos carecen de protección radiológica.
El médico agregó que prueba de ello es que las paredes están construidas en gypsum (láminas que simulan el concreto).
Valverde dio su criterio bajo la aclaración de que esas salas no están bajo su responsabilidad, sino de las secciones de Neurociencias y Emergencias.
Pero sus aseveraciones fueron refutadas por la gerente de Infraestructura de la Caja, Gabriela Murillo. Ella señaló que los quirófanos cumplieron “todos los criterios técnicos y normativos aplicables en el momento de su construcción”.
Añadió que “las salas fueron entregadas completamente equipadas y listas para ser utilizadas”.
En cuanto al plomo, Murillo dijo que ese requerimiento lo solicitó el Calderón Guardia hasta el 2008.
No obstante, criticó que el centro de salud no utilice las salas para cirugías que no requieren protección radiológica.
Se intentó obtener el parecer de Olga Villalta y Luis Madden, jefes de Neurociencias y de Emergencias, respectivamente, pero no se les pudo localizar en sus teléfonos celulares.
Pero para Valverde, aunque las seis nuevas salas funcionaran a cabalidad, el centro médico no cuenta con el personal suficiente para ponerlas a operar. “Tenemos 18 anestesiólogos cuando lo ideal es tener al menos 30”, dijo el médico.
Pese a eso, la gerente Murillo señaló que el uso de las salas es responsabilidad de las autoridades hospitalarias.
La situación del Calderón Guardia, que atiende pacientes de todo el país, es casi idéntica a la de otros grandes hospitales de la Caja.
A mitad de año, la entidad cerró todos los quirófanos del San Juan de Dios por fallas de todo tipo (aire acondicionado en mal estado, herrumbre y hasta roedores); meses después una acción similar se hizo en el Hospital Nacional de Niños.