Colaboradora
Rastros de corrosión, espesor de láminas o daños en válvulas y soldaduras, son aspectos determinantes a la hora de revisar los tanques de un camión cisterna.
Independientemente de sus características y condiciones, los camiones con más de 10 años de antiguedad son los únicos que, por ley, se someten al proceso.
Así lo explicó el coordinador del Centro de Investigación y Extensión de Materiales del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC), Óscar Chaverri.
El ingeniero puso en lista una serie de factores que definen si se aprueba o rechaza una inspección de los vehículos que transportan hidrocarburos.
El espesor de la lámina del tanque es uno de los elementos que se incluyen en la revisión y oscila, dependiendo si es de acero o de aluminio, entre los 2 y los 6 milímetros.
Un mínimo rastro de corrosión es inadmisible para efectos de seguridad. Cualquier tanque podría presentarlos, pero los mecanismos para advertirlos cambian según el material del que se conforme.
Por otra parte, la estructura del recipiente debe dividirse en compartimentos que minimicen los efectos que el movimiento del líquido pueda ocasionar al balance general del vehículo. La cantidad de separadores o “rompeolas” se define según el tamaño del tanque.
Las soldaduras, válvulas y tuberías deben estar en perfectas condiciones, sin rupturas ni el mínimo daño, así como los sellos de las tapas que pudieran provocar derrames, en algunos casos.
El uso de varillas es el método más común para medir los niveles de líquido en el cisterna, y por ello se supervisa que estén correctamente calibradas para lograr mediciones precisas, de acuerdo con lo dicho por Chaverri.
Requisitos previos. Los propietarios de vehículos cisterna deben tomar en cuenta dos detalles esenciales antes de ir a una inspección en los centros designados.
El primero es tener al día los documentos de Riteve, inscripción en el Registro y seguros pertinentes.
En muchos casos, las placas de identificación impresas en los tanques (que contienen sus propiedades originales) se extravían o se borran con el tiempo.
Si esto ocurre, los dueños deben buscar soluciones antes de llevar sus vehículos a revisión.
Por último, el recipiente solo se admitirá si está perfectamente limpio, tanto en la parte externa como en la interna.
Actualmente, seis empresas (Saret, La Cruz, Flota de Servicios Inmediatos, Green Fuel, HB y Fundatec) están autorizadas por el Minaet para brindar los servicios de inspección.
Desde julio del 2011, el TEC paralizó las revisiones para enfocarse únicamente en capacitaciones y procesos de nivelación.
“Hay otras empresas que hacen un trabajo más exhaustivo que el nuestro, tienen más estructura y pueden incluso dar repuestos”, dijo el ingeniero del TEC.
Chaverri no dijo cuándo volverán a ofrecer el servicio.