Falta de acuerdo impide elegir magistrado de Sala Primera en el Congreso

Los diputados no lograron un acuerdo para reunir los 38 votos necesarios para elegir al nuevo magistrado de la Sala I de la Corte Suprema de Justicia, esta noche.

Aunque se inició el proceso de elección, para lo cual habían acordado realizar cinco rondas de votación, los legisladores solamente hicieron una ronda, en la cual ninguno de los aspirantes a la magistratura logró los votos.

Tras el primer round, el candidato liberacionista al puesto, Sergio Ramírez, obtuvo el apoyo de 26 congresistas; William Molinari alcanzó los diez votos e Ileana Sánchez llegó a 13 sufragios. Ellos son los miembros de la terna que recomendó la Comisión de Nombramientos al plenario para la elección del nuevo miembro de la Corte.

Antes de continuar con una segunda ronda y ante la posibilidad de no lograr los votos necesarios, los legisladores presentaron una moción para aplazar la elección.

El jefe del Frente Amplio, Gerardo Vargas, y el liberacionista Antonio Álvarez Desanti coincidieron en que se requieren más negociaciones para alcanzar un acuerdo sobre uno de los candidatos. Para ambos, habría sido atropellado elegir en una sesión nocturna demasiado extensa.

A ello, el oficialista Ottón Solís recalcó que el expediente para la elección del magistrado de la Sala I se encuentra en el Congreso desde agosto del 2014 y que ya casi se cumplirá un año sin que el plenario haya tomado una decisión.

Aunque las mociones para levantar la sesión plenaria no tuvieron el apoyo suficiente, el presidente legislativo, Rafael Ortiz, levantó la sesión a las 9 p. m., tal como se lo permitía la moción acordada por las nueve fracciones legislativas, para sesionar durante las noches, en horario extendido.

La preocupación de los legisladores se centra en que, además del propietario de la Sala Primera, está pendiente el nombramiento de los magistrados suplentes de la Sala Segunda, cuyo plazo se vence este jueves. De la Corte, ya pidieron a los legisladores ratificar los suplentes, antes de que el trabajo se ese órgano judicial se vea paralizado.