Honduras traslada miembros de pandillas a una nueva cárcel de mayor seguridad

Un total de 42 líderes de pandillas presos fueron trasladados a una nueva cárcel para evitar que sigan dirigiendo acciones delictivas desde sus celdas, dijo el viernes una fuente oficial.

Once de los reclusos estaban en el Segundo Batallón de Infantería y los restantes en la Penitenciaría Nacional de Támara, ambos 15 kilómetros al norte de la capital. Todos fueron trasladados a la nueva prisión 'La Tolva', en la zona de Morcelí, 40 km al este, según dijo el Instituto Nacional Penitenciario (INP) en un comunicado.

Debido a que las prisiones estaban sobrepobladas, el gobierno había habilitado celdas en batallones e instalaciones policiales pero intenta buscar solución al hacinamiento construyendo tres nuevas instalaciones.

Vestidos con uniforme color naranja, los reos fueron trasladados en un fuerte operativo de militares y policías.

Esa nueva cárcel denominada por el presidente Juan Orlando Hernández como 'El Pozo II' fue habilitada el 16 de mayo, cuando el gobierno trasladó desde otros recintos 700 miembros de la temida pandilla Barrio 18.

Hernández dispuso también la construcción de tres nuevas instalaciones, para que los privados de libertad permanezcan sin posibilidades de tener comunicación con el exterior, para evitar, según dijo, que sigan ordenando crímenes desde las cárceles.

El Pozo I, una cárcel de máxima seguridad, fue inaugurada el año pasado en Ilama, departamento de Santa Bárbara, unos 120 km al noroeste de la capital.

Las dos nuevas prisiones albergan más de 2.100 presos de las pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha (MS-13).

En el país hay 30 cárceles con una población de casi 19.000 privados de libertad, según el último censo del INP.