Guatemala. AFP Y EFE El expresidente de Guatemala Alfonso Portillo regresó anoche a su país desde Estados Unidos tras purgar 70 meses de cárcel por lavado de dinero.
Su arribo se dio en un ambiente de fiesta preparado por sus seguidores.
El avión comercial en que llegó el exgobernante aterrizó pasadas las 8 p. m. en el aeropuerto internacional La Aurora, de la capital guatemalteca, confirmó a periodistas su exesposa Evelyn Morataya.
“Estoy feliz. Estoy muy feliz de estar con mi hija, con mi exesposa Evelyn y con mi hermana. Es muy emocionante volver”, manifestó el exmandatario ante decenas de periodistas.
Agregó: “He vivido cinco años en cautiverio, alejado de mi familia. Y ese tiempo me ha servido para pensar, leer y estudiar, y también para conocer a gente que estuvo recluida conmigo con grandes pensamientos”, subrayó Portillo.
El exgobernante abandonó la mañana de ayer el Correccional Federal Englewood, de Denver, Colorado, donde concluyó la condena que le impuso el juez federal Robert Patterson, de Nueva York.
Portillo, de 63 años, fue el primer exgobernante latinoamericano en haber sido entregado por su propio país a la justicia estadounidense.
Fue extraditado hacia Estados Unidos en mayo del 2013 y un año después fue condenado por Patterson por el blanqueo en bancos estadounidenses de $2,5 millones en sobornos recibidos de Taiwán para que Guatemala mantuviera el reconocimiento diplomático a la isla.
La sentencia fue de 5 años y 10 meses de prisión, pero la justicia norteamericana reconoció el tiempo de prisión servido en Guatemala, donde el expresidente estuvo detenido desde el año 2010.
El retorno del expresidente ha generado una expectativa política dentro del ambiente electoral guatemalteco, a casi siete meses de que la población elija en setiembre a un nuevo mandatario, además de 157 diputados, 20 legisladores al Parlamento Centroamericano y 338 autoridades municipales.