EscucharKiev (EFE).
El ganador de las elecciones presidenciales extraordinarias que se celebrarán en Ucrania el próximo 25 de mayo tendrá un mandato de cinco años, dictaminó este viernes el Tribunal Constitucional ucraniano.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gruponacion/TFQH6MDPD5BF5FT7H27ADZJZA4.jpg)
Miles de personas permanecen hoy en el centro de Kiev tras pasar otra noche gélida en las calles para exigir la dimisión del presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, al que no perdonan su negativa a firmar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea (UE). (FILIP SINGER)
"El presidente se elige para un período de cinco años independientemente de si es elegido en comicios ordinarios o extraordinarios", señala la resolución.
Un grupo de 101 legisladores había solicitado al Constitucional pronunciarse sobre el particular, luego de que las próximas elecciones presidenciales ordinarias estaban previstas para marzo del 2015.
El Parlamento de Ucrania convocó a elecciones presidenciales extraordinarias el 22 de febrero pasado, mismo día en que destituyó al anterior presidente, Víctor Yanukóvich, por dejación de funciones.
Yanukóvich fue derrocado por una revuelta popular que comenzó a fines de noviembre del año pasado después de que se negara a firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea.
Según las encuestas, el empresario Petró Poroshenko ganará las elecciones presidenciales ya en la primera vuelta tras el derrumbe en los sondeos de la ex primera ministra, Yulia Timoshenko.
Poroshenko, que ha mantenido un perfil bajo durante casi toda la campaña, recibirá el 54,7% de los votos, 7-8 puntos más de lo que los sondeos le concedían el pasado mes de abril.
Mientras, Timoshenko, que se ha mostrado muy activa e incluso viajó a la región de Donetsk, la plaza fuerte de la sublevación prorrusa en el sureste del país, se tendrá que conformar con un 9,6%.
El tercer candidato en discordia sería el banquero Serguéi Tiguipko, antiguo asesor electoral del depuesto presidente.
Poroshenko, que participó activamente en la incruenta Revolución Naranja del 2004, es considerado el principal patrocinador de la revuelta que derrocó a Yanukóvich.
