El Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional, que vigila el comportamiento del coloso, dijo que el volcán sigue expulsando ceniza y sacude los alrededores con esporádicas explosiones.
Extensas zonas que llegan hasta unos 30 km alrededor del volcán han registrado la caída de ceniza desde el jueves, cuando se reactivó tras cuatro meses de calma.
Sin embargo, en la zona de la ciudad turística de Baños de Agua Santa, situada al pie del volcán, la ceniza ha sido mínima, según señaló su alcalde, Hugo Pineda, debido a la dirección del viento.
Pineda recordó que, según datos de los científicos que vigilan al Tungurahua, la montaña arroja entre 1.000 y 6.000 toneladas métricas de ceniza al día, lo que ha generado problemas en zonas agropecuarias cercanas.
“Se podría perder la producción” si las lluvias no son suficientes para limpiar la ceniza que se ha depositado en los cultivos, dijo.