Juba, Sudán (AFP). Los sudaneses del Sur votaron masivamente el domingo en el primer día de un histórico referéndum, esperado desde hace más de 50 años, que debe desembocar en la partición del país más grande de África, entre el Norte, árabo-musulmán, y el Sur, afro-cristiano.
El presidente estadounidense Barack Obama y su secretaria de Estado Hillary Clinton dieron su apoyo a la consulta.
"Estados Unidos está completamente comprometido a ayudar a las partes para resolver las cuestiones críticas tras el referéndum, sea cual sea el resultado de la votación", afirmó Obama desde Washington.
Por su parte, Clinton calificó de "exitoso" el inicio del referéndum, que "representa un avance histórico" hacia la paz, dijo.
Varios actos de violencia ensombrecieron el ambiente festivo de este primer día de consulta.
Al menos ocho personas murieron en enfrentamientos entre tribus rivales en el disputado enclave de Abyei, situado en la frontera entre el Norte y el Sur del país. También se registraron choques entre rebeldes y soldados sursudaneses en una región petrolífera fronteriza, pero no se disponía de información sobre eventuales víctimas.
En Juba, la capital de Sudán del Sur, la participación fue muy importante y se formaron largas colas frente a los colegios electorales, la mayoría de los cuales cerró a las 17:00 locales (8 a.m. en Costa Rica). Sin embargo, varios centros permanecieron abiertos una hora más para recibir a los electores, según periodistas de la AFP.
"Es el momento histórico que los sudistas sudaneses esperaban", declaró el presidente de esta región semiautónoma, Salva Kiir.
Aproximadamente cuatro millones de sureños, residentes en Sudán del Sur, pero también en el norte y en el extranjero, fueron convocados a las urnas para decidir entre seguir manteniendo la unidad o separarse, lo que cuestionará las fronteras heredadas de la colonización occidental en África.
La votación durará hasta el 15 de enero.
"Es un nuevo día, porque votamos por nuestra libertad. Hemos combatido durante muchos años, pero hoy este voto por la separación es también un voto por la paz. El sol saldrá pronto en un Sudán del Sur libre", declaró Wilson Santino, un elector.
Los colegios electorales abrieron también en Jartum, metrópoli del norte de Sudán, pero estaban vacíos, según una periodista de la AFP. En el norte viven actualmente 115.000 sureños.
"Es el comienzo de un nuevo capítulo en la historia de Sudán, un capítulo muy importante. Estoy muy esperanzado. Fue formidable ver a Salva Kiir votar hoy. Es la culminación de negociaciones difíciles, muchos obstáculos debieron ser vencidos", dijo el senador estadounidense John Kerry, observador del referéndum.
Esta votación es el punto clave del acuerdo de paz global que puso fin en 2005 a más de dos décadas de guerra civil entre el Norte y el Sur.
"Si el Sur se independiza, habrá mucho por hacer, porque será el nacimiento de un nuevo país. El Norte y el Sur pueden contar con nuestro apoyo", aseguró el emisario estadounidense Scott Gration, también presente en la apertura de los colegios electorales en Juba.
Los dos políticos estadounidenses estaban acompañados de un célebre compatriota, el actor George Clooney.
"Es fantástico. Es un gran día para el mundo entero", dijo el actor.
En la víspera del referéndum, Salva Kiir abogó por una "coexistencia pacífica" entre el Norte y el Sur, después de que combates en las regiones limítrofes hubiesen ensombrecido el sábado los preparativos de la votación.
Por otra parte, en la región de Darfur, en el oeste de Sudán, un sudanés que trabajaba para la ONG Care International fue asesinado el viernes, informaron el domingo los cascos azules de la misión de paz de la ONU y la Unión Africana.