Río de Janeiro. AP El famoso diseñador brasileño Sergio Rodrigues, cuyo sillón “Mole” es una de las piezas más características del diseño brasileño de mediados del siglo XX murió a los 86 años por una insuficiencia hepática.
Originario de Río de Janeiro, Rodrigues estudió arquitectura antes de comenzar con el diseño de muebles.
De acuerdo con su biografía oficial, diseñó más de 1.200 piezas diferentes, aunque ninguna fue más famosa que su sillón “Mole”, cuyo nombre significa suave en portugués.
Creado en 1957, el sillón individual tiene una estructura baja de madera cubierta de almohadones tapizados en piel, adornados con grandes botones y viene acompañado de un cómodo escabel. Según críticos que la han elogiado representa el diseño brasileño en su más puro estado.
El diseño se llevó el premio mayor en la competencia internacional de muebles Cantu en Italia en 1961. En 1974 el Museo de Arte Moderno de Nueva York adquirió un sillón “Mole” para su colección, señala su biografía.
Maria Cecilia Loschiavo dos Santos, historiadora especializada en diseño brasileño, dijo que el “Mole” representó una “gran revolución”.
Al igual que muchos de sus otros diseños, el sillón estaba hecho de jacaranda, una madera dura en peligro por su sobreexplotación en Brasil. Después la fábrica con el permiso para producir sus diseños cambió a maderas como el eucalipto, y el “pau marfim”, obtenida del árbol brasileño Balfourodendron riedelianum.
Otros de sus diseños famosos son el sillón “Kilin” (1973), y el “Diz” (2003). Mientras que la impresionante silla “Chifruda” de 1962 tiene un remate con forma de cuernos.
A Rodrigues le sobreviven su esposa y tres hijos.