Caracas. AFP. Más de 20 presos murieron el domingo en una riña entre bandas en la cárcel de Yare I, cerca de Caracas, informó ayer el Gobierno, en un nuevo episodio violento en penales venezolanos, donde se estima que fallecieron más de 300 reclusos desde enero.
“Sí, pasan los 20 (fallecidos) y hay un familiar que también perdió la vida, un familiar de uno de los internos”, dijo al canal estatal VTV la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, consultada por el balance de la violencia. Afirmó que la situación ya estaba controlada.
“Allí hubo un enfrentamiento entre dos grupos que se encuentran fuertemente armados dentro del penal, hubo ese enfrentamiento y se generó esa situación” de violencia, explicó la ministra.
El director del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) , Humberto Prado, alertó que hasta la madrugada de ayer ingresaron a la morgue de la zona “25 cadáveres” y otras 40 personas fueron atendidas por heridas.
“Los responsables de las muertes dentro de las cárceles van a tener que responder por eso”, dijo Varela, asegurando que los hechos en Yare I fueron iniciados por internos “que quieren mantener el control (de la cárcel) utilizando la fuerza”, reseñó la agencia estatal AVN.
El conflicto pudieron haberlo iniciado internos que habían sido trasladados a Yare I desde la cárcel de La Planta, en el corazón de Caracas, y que fue clausurada por el Gobierno en mayo tras un violento motín, señaló la prensa local.
Para Prado, esta versión es posible pues la llegada de “un gran número de reos desde La Planta aumentó el hacinamiento y la tensión” en este centro.
Yare I, la misma cárcel donde estuvo preso el presidente Hugo Chávez tras liderar un fallido golpe de Estado en 1992, tiene una “capacidad instalada de 750 personas, pero hay 3.150, lo que implica un excedente de 2.400 internos y un hacinamiento de 340%”, según Prado.
La reyerta habría estallado cuando cientos de familiares de los reos, que acudieron a la jornada de visita del domingo, aún se encontraban dentro de las instalaciones.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos dictó en el 2006 medidas provisionales de protección para esta cárcel que fueron solicitadas por organizaciones no gubernamentales tras otro hecho violento ocurrido ese año, el cual causó 16 muertos.
“Lamentablemente, las medidas de protección, que ordenaban al Estado adoptar de forma inmediata medidas para acabar con la violencia en la cárcel de Yare, no han sido atendidas”, dijo Prado, quien agregó que solo en el primer semestre de este año fallecieron 304 presos en episodios de violencia en distintos penales venezolanos.