Tras la polémica decisión del Nicolás Sarkozy de llamar a una manifestación de sus partidarios para celebrar el “verdadero trabajo” el 1.° de mayo, denunciada como una “provocación” por la izquierda, tres manifestaciones tendrán lugar en París paralelamente.
La convocada por Sarkozy se agregará al tradicional desfile sindical, marcado a la izquierda, y al que desde hace años la extrema derecha, acusada ya de querer recuperar la fiesta del trabajo, organiza en la misma fecha en honor de Juana de Arco.
En el marco de los debates cada vez más ásperos de la campaña para la elección presidencial, el 1.° de mayo adquiere una dimensión de enfrentamiento político pese a que los sindicatos quieren que el eje de sus desfiles sean las reivindicaciones sociales.
Sarkozy, quien no escatimó durante la campaña sus ataques a los sindicatos, en particular a la central CGT, que llamó a votar contra él, reiteró sus críticas ayer y acusó a sus dirigentes de “traicionar la causa del sindicalismo”.
“Hollande desfilará detrás de las banderas rojas de la CGT; yo hablaré ante un bosque de banderas tricolores”, dijo, pese a que su rival anunció que no participará en ningún desfile. Hollande asistirá hoy en Nevers (Borgoña) a una ceremonia en memoria del ex primer ministro Pierre Bérégovoy, quien se suicidó el 1.° de mayo de 1993.
Cerca de 300 desfiles están previstos en todo el país.