En anteriores años, Morales encabezó las marchas de los sindicatos, como reflejo de su fuerte alianza con los obreros, aunque en esta oportunidad optó por un acto en el Palacio Quemado , donde dio a conocer la norma y además un incremento salarial de 8%.
Mientras Morales emitía su discurso en la plaza de Armas, donde se halla el palacio presidencial, a pocas cuadras los mineros que protestan contra el Gobierno hicieron bombetas de dinamita y centenares de petardos, durante sus marchas callejeras, sin mayores incidentes.
“Los trabajadores rechazamos ese incremento salarial (8%), pero el jueves un ampliado (reunión) nacional de dirigentes definirá una posición oficial y qué acciones tomamos”, afirmó Juan Carlos Trujillo, líder de los obreros.
Trujillo dijo que la nacionalización de la firma de electricidad no frenará los reclamos laborales.