“ No, no nos sentimos responsables”, enfatizó Jones a la cadena local FirstCoast News en Florida, añadiendo que “los musulmanes y los extremistas del Islam han usado eso como una excusa”, concluyó.
“Si no nos tuviesen a nosotros como excusa usarían otra”, añadió el polémico religioso.
El pasado 20 de marzo en la iglesia Dove World Outreach Center, en Gainesville (Florida), Jones permitió que otro pastor llamado Wayne Sapp quemara una copia del libro sagrado de los fieles musulmanes.
La acción de Sapp, que pasó inicialmente inadvertida, desencadenó una ola de condenas generalizadas entre las autoridades del mundo islámico.
En el 2010, Jones llamó públicamente a los estadounidenses a quemar una copia del Corán durante el aniversario de los ataques terroristas del 11 de setiembre de 2001 en Estados Unidos y dijo que temía además que la comunidad musulmana impusiera la ley islámica en el país. Su plan causó tanto revuelo como rechazo generalizado.