Mitsubishi admitió, este martes, haber utilizado desde 1991 un método inadecuado para las pruebas de eficiencia energética de sus vehículos, un nuevo golpe tras una serie de escándalos que han afectado al constructor japonés.
Mitsubishi admitió, este martes, haber utilizado desde 1991 un método inadecuado para las pruebas de eficiencia energética de sus vehículos, un nuevo golpe tras una serie de escándalos que han afectado al constructor japonés.