Si el gobierno no se hubiera endeudado en el exterior posiblemente tendríamos un tipo de cambio más realista y más alineado con el verdadero precio que debería tener nuestra moneda.
Si el gobierno no se hubiera endeudado en el exterior posiblemente tendríamos un tipo de cambio más realista y más alineado con el verdadero precio que debería tener nuestra moneda.