La Sala Constitucional determinó en setiembre que el logotipo utilizado por el Gobierno no constituye un irrespeto a la bandera y no vio ningún inconveniente en su uso. Así lo resolvió al desestimar un recurso de amparo interpuesto por una mujer.
La Sala Constitucional determinó en setiembre que el logotipo utilizado por el Gobierno no constituye un irrespeto a la bandera y no vio ningún inconveniente en su uso. Así lo resolvió al desestimar un recurso de amparo interpuesto por una mujer.