Jennifer O’Neill, la demandante, trabajó para la cantante durante dos meses a principios de 2009, y a partir de febrero de 2010 trabajó otros 13 meses pero afirma que no recibió pago por horas extra
Jennifer O’Neill, la demandante, trabajó para la cantante durante dos meses a principios de 2009, y a partir de febrero de 2010 trabajó otros 13 meses pero afirma que no recibió pago por horas extra