La labor de la costarricense Isabel Johanning sobresale en un recóndito rincón de África. A sus 73 años espera seguir ayudando a niños y niñas hasta ‘que Dios así lo quiera’.
Etiquetas isabel johanning
Isabel Johanning, de 70 años, se encuentra en estado crítico en Guinea Bisáu. La mujer dulce y tenaz a quien llaman “Mamá blanca” lucha por sobrevivir. Desde Casa Emanuel, orfanato que fundó, se busca apoyo para comprar tanques de oxígeno que la ayuden a ella y a otras personas.
Desde hace 26 años una misionera costarricense llegó a un pequeño país del occidente africano para llevar calor maternal y proteger a los niños desamparados, entre ellos, los de un centro de rehabilitación en el que habitan pequeños discapacitados.