Una joya marca la diferencia en el vestuario. Ese accesorio es una especie de arma de doble filo, en cuya elección debe existir el mismo cuidado como en la escogencia de los zapatos, el maquillaje o el peinado que complementarán su atuendo.
Una joya marca la diferencia en el vestuario. Ese accesorio es una especie de arma de doble filo, en cuya elección debe existir el mismo cuidado como en la escogencia de los zapatos, el maquillaje o el peinado que complementarán su atuendo.