Aunque la pérfida guerra de Vladímir Putin contra Ucrania ha unido a Estados Unidos y sus aliados, no hay buenas razones para pensar que la justicia pondrá fin al derramamiento de sangre
Aunque la pérfida guerra de Vladímir Putin contra Ucrania ha unido a Estados Unidos y sus aliados, no hay buenas razones para pensar que la justicia pondrá fin al derramamiento de sangre