Un escandaloso robo en el templo de San Joaquín de Flores motivó, en un acto de amor y fe, a Fabrizio Acquafresca y Andrea Castillo a trabajar duro para que la comunidad recuperara una significativa pieza religiosa.
Un escandaloso robo en el templo de San Joaquín de Flores motivó, en un acto de amor y fe, a Fabrizio Acquafresca y Andrea Castillo a trabajar duro para que la comunidad recuperara una significativa pieza religiosa.