La iglesia, la plaza, el salón comunal, las casas... casi todo se lo llevó el río Aranjuez, envalentado por las lluvias que trajo la tormenta Nate desde la noche del miércoles.
La iglesia, la plaza, el salón comunal, las casas... casi todo se lo llevó el río Aranjuez, envalentado por las lluvias que trajo la tormenta Nate desde la noche del miércoles.