08/04/2011.Hora 11:04 a.m. Contruccin de la nueva terminal del aeropuerto Daniel Oduber en Liberia. En la foto. CARLOS GONZALEZ/GRUPO NACION. (CARLOS GONZALEZ CARBALLO.)
La estructura de 21.000 metros cuadrados que levanta el consorcio Coriport recibirá pasajeros a partir de noviembre, siete meses después de lo previsto.
Eso lo expone a una sanción que rondará los ¢272,7 millones ($540.000), según precisó Luis Carlos Araya, viceministro de Transporte Aéreo y Marítimo.
Explicó que Coriport firmó un contrato de concesión en el que se comprometía a construir el aeropuerto en seis meses, plazo que vence el 19 de abril.
Sin embargo, luego se percataron (Coriport) de que no tendrían la obra a tiempo, agregó Araya.
Francisco Cordero, nuevo gerente general del aeropuerto por parte del consorcio Coriport, aseguró que “honrarán” los compromisos del contrato.
“Pese a que hemos puesto a disposición todos los recursos posibles para desarrollar y finalizar la nueva terminal, con la mejor calidad y en el menor tiempo posible, tomando en cuenta su tamaño y magnitud, el proyecto no se concluirá en el tiempo establecido”, declaró Cordero.
Mario Lara, director del proyecto, dijo que el atraso tiene que ver con el equipamiento de la terminal, pues los ascensores o las escaleras eléctricas tardan hasta ocho meses en llegar al país, desde que se contrata su construcción, a la medida, en el exterior.
El viceministro Luis Carlos Araya insistió en que Coriport debió tomar en cuenta este tipo de inconvenientes antes de ofertar la construcción en un plazo máximo de seis meses.
Agregó que el monto definitivo de la multa se fijará cuando el concesionario complete la edificación de la terminal.
Esa cifra rondará entre los $500.000 y los $600.000, anticipó Jorge Fernández, titular de la Dirección General de Aviación Civil.
Coriport es un consorcio de capital estadounidense, canadiense y costarricense que se adjudicó la concesión del edificio terminal de Liberia durante 20 años.
El principal accionista es ADC- HAS (Houston Airport System), el mismo que asumió la construcción del aeropuerto Juan Santamaría.
La obra completa costará $35 millones, con equipamiento.
Analibe Rosales, administradora de la terminal, y el viceministro Araya confirmaron que los pasajeros tienen que hacer largas filas bajo el sol para poder abordar su avión o hacer trámites migratorios.
“Hemos tenido que contratar toldos porque ya se nos han descompuesto personas por insolación”, reconoció Araya.
Hoy, la vieja terminal solo tiene capacidad para atender 900 personas simultáneamente. Cuando se estrene el nuevo edificio, la concesionaria garantiza la atención de 1.500 pasajeros al mismo tiempo.
Contrario al viejo aeropuerto, esta nueva estructura tendrá cuatro puentes de embarque, para evitar que los pasajeros se asoleen y otras tres posiciones remotas, donde sí es obligatorio usar una escalinata para subir al avión. Dos de estas tendrán aceras techadas.
El edificio contará con dos salas de abordaje en los extremos, un área para alimentos, puestos de café, chocolates y artesanías, y una tienda de conveniencia para compras de última hora.