Sin que se lo pregunten, el director de la firma mexicana revela algunas cifras. Dice que todo va según su plan de vuelo, aunque es difícil la conquista.
Primero, estamos de acuerdo con lo que estaba establecido en el plan de negocios. Hemos encontrado un costarricense ávido de servicios de telecomunicación móvil pero sencillos de usar y empaquetar.
”El consumidor necesita facilidad y sencillez. El gran éxito de nuestras promociones han sido la sencillez como están siendo comunicadas al cliente”.
Este es un cambio de paradigma. Este era un mercado telefonero y ahora es un mercado de servicios.
Ha sido positiva porque ya llegamos a 100.000 clientes.
Así es.
Hay un componente más grande de prepago. Eso es usual en América Latina y en el mundo entero.
Es 60% prepago y 40% pospago.
Los sistemas nuestros nos permiten ver un comportamiento en tiempo real para ver el número de altas (teléfonos activados) y vemos un consumo rutinario. Cierto, que un mes es muy poco, pero en este tiempo ya veo un ciclo de vida.
Va a depender mucho de cómo defendamos nuestro parque de clientes prepago. Creo que nosotros le dimos por primera vez un golpe fuerte al prepago.
En prepago se ha venido un gran parque de clientes del ICE que quiere probar algo diferente. Hay un consumidor nuevo, que son los hijos de la casa y los inmigrantes, principalmente, de Nicaragua.
Con los mismos problemas que tenemos como entrantes. Los dos estamos sufriendo la curva de subida en un mercado acostumbrado a una vida monopolística. Yo veo mis tiendas más llenas que las de ellos, pero eso es una apreciación personal. A Movistar los respetamos mucho como competidores.