“ Vengo del centro de Moravia y voy hacia el Cementerio de La Uruca. Usé dos de las interlíneas y me parece perfecto. Tomar toda la ruta de La Uruca siempre es tremendo, pero aquí se economiza uno mucho tiempo, estrés y plata”.
Ana Isabel Brenes
68 años
‘Trabajo en Escazú y voy hacia mi casa en Pavas. El servicio está excelente, antes duraba hasta dos horas y ahora son 20 minutos. Me costaba el pasaje mil y resto, con los dos buses, y ahora ¢700. ¡Claro que vamos a ser clientes fijos!”.
José Leonel Palma
51 años
“Más temprano fui de mi casa, en La Uruca, hacia Pavas y ahora voy de vuelta. Es muy rápido, duré unos 25 minutos, y es agradable. Se ahorra uno bastante porque la tarifa es muy cómoda, aunque sí faltan y sobran algunas paradas”.
José Adrián Rodríguez
19 años
“Venimos de Pavas hacia Escazú y vamos de Escazú hacia La Uruca. Estamos solo conociendo todo el recorrido para ver si nos sirve, a ver si con el tiempo va agarrando pull y se pone grueso el asunto, porque no pasar por San José es un alivio”.
Ninguno de los buses de Interlínea iba repleto. Más bien, los pasajeros viajaron con plena comodidad, todos sentados, en el estreno de este servicio, ayer, en San José.
Las que sí no cambiaron mucho fueron las calles donde hay más tránsito, ya que no se percibió una reducción en las presas. Pero, era apenas el primer día.
A las 5 a. m. encendieron los motores de las unidades que sirven las tres rutas: de Guadalupe a La Uruca; de Desamparados a Moravia y de La Uruca a Escazú. Los usuarios pagan ¢350 y evitan, así, hacer trasbordo en el centro de la capital.
Silvia Bolaños, viceministra de Transportes, estaba satisfecha.
“Lo que pueda decir ahorita podría ser algo sesgado, pero en algunas rutas como Desamparados- Moravia tuvo un promedio de 20 personas por media carrera, que para los empresarios resultó una cantidad de usuarios muy superior a los que en principio se esperaba”.
Alfredo Villalobos, presidente de la Cámara Nacional de Autobuseros (Canabus) lo reafirmó.
“Estamos sorprendidos de la cantidad de gente que está usando el servicio; aunque no iba gente de pie ni buses abarrotados, iba más gente de la que esperábamos para ser el primer día de servicio.
“Vamos a hacer el conteo de las barras electrónicas de los buses y este viernes daremos un conteo de cuánta gente usó las interlíneas”.
Un total de 36 buses, que en promedio llevan 48 personas sentadas y 30 de pie, cubren cada ruta en un tiempo aproximado de una hora.
A tiempo. A bordo de los buses, varios usuarios dijeron a periodistas de La Nación , sentirse cómodos. Resaltaron la puntualidad y lo rápido de los recorridos. Por ejemplo, a las 10 a. m., fuera de la hora pico, el bus de la ruta Moravia-Desamparados completó su recorrido en 10 minutos menos de lo previsto.
En esa unidad viajaron, en promedio, unas 12 personas y donde hubo más movimiento fue en las paradas del parque de Moravia, la rotonda de Betania, Muñoz y Nanne, el parque de Curridabat y el parque de Desamparados.
Empero, siempre hubo quejas. Yuri Iglesias, quien viajó de San Pedro a Desamparados, dijo que el servicio no cumplió al 100%.
“Bien en cuanto a la ruta y al servicio, pero los tiempos entre un servicio y otros están lentos. No cumplió con mis expectativas”, indicó.
Carol Castillo, usuaria de la misma ruta, es más positiva: “Solo es un viaje y es solo un pase. Antes pagaba unos ¢1.000 en pasajes diarios. Estoy probando el servicio”.
Congestión. Durante las horas pico, periodistas de La Nación comprobaron que vías que luego del hundimiento en la carretera de Circunvalación se saturan, tenían las mismas presas. Un ejemplo de ello eran la vías Alajuelita hacia Escazú, pasando por La Aurora y la radial La Aurora hacia La Sabana.
Igual congestionamiento se vio en las avenidas 4,6 y 8 en San José.
Silvia Bolaños dijo que por un día no se va despejar la capital.
“El servicio está pensado para que el usuario de bus no tenga que entrar al centro de San José, pero el impacto en la disminución de los vehículos, usted lo va a conseguir cuando la persona que usa el carro se concientize y deje el carro en su casa y use el bus”, dijo.
En un plazo de seis meses, cuando la interlínea esté posicionada con un servicio eficiente, ella espera que los dueños de autos se incorporen a la iniciativa. Colaboraron : Doriam Díaz y Pablo Fonseca