A partir de la próxima semana, cada litro de gasolina súper aumentará ¢43; el de regular subirá ¢35 y el diésel, ¢36.
De esta forma, el litro de súper pasará de ¢600 a ¢643, el de regular subirá de ¢575 a ¢610 y el de diésel, de ¢478 a ¢514.
Los nuevos precios, ya aprobados por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), entrarán a regir la próxima semana a partir de su publicación en el diario oficial La Gaceta.
De acuerdo con la Aresep, el aumento es provocado por la rebaja en las reservas de los productos destilados en Estados Unidos y al aumento de la demanda en ese país.
Por ejemplo, para el período de referencia (23 abril y 7 de mayo) el precio del barril de gasolina superior pasó de $74,19 en abril a $86,42 en mayo. En el caso del diésel, el precio del barril aumentó de $69,73 en abril a $80,14 en mayo.
"Con este ajuste, el precio internacional es el componente principal del precio de las gasolinas (45% aproximadamente). Para el caso del diésel, este factor representa un poco más del 50% del precio", informó la Aresep esta tarde, mediante un comunicado de prensa.
El órgano regulador manifestó que, en el caso del gas, el precio de los cilindros de 25 libras - comúnmente utilizados en los hogares- tendrá un incremento de ¢2.
Esta sería la cuarta alza consecutiva de los combustibles, luego de ocho ajustes a la baja entre el 2014 y el 2015.