Diez hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social ubicados cerca de puntos de ingreso aéreos, terrestres o marítimos del país están siendo reforzados para detectar y atender posibles casos de ébola en el país.
Se trata de los hospitales Tony Facio en Limón, el Enrique Baltodano de Liberia, Monseñor Sanabria de Puntarenas, San Rafael de Alajuela, San Vicente de Paúl en Heredia, Hospital de Ciudad Neily, el Hospital Nacional de Niños, el San Juan de Dios, Calderon Guardia y el Hospital México.
En estos centros médicos se reforzaron las áreas de laboratorio, se capacitó al personal acerca de la enfermedad y se fijaron protocolos que definen cuáles son las zonas de aislamiento y los procedimientos de atención en caso de que haya una persona con síntomas del virus.
El anuncio lo hicieron autoridades de Salud esta mañana, luego de que ayer fuera confirmado el primer caso del virus en América.
María Ethel Trejos, directora de Vigilancia de la Salud, aseguró que si bien la presencia de este caso no modifica el nivel de alerta en el país, evidencia la posibilidad de que una persona con el virus pueda ingresar a cualquier nacion.
"La red de servicios de salud esta dispuesta para la atención de posibles casos, dependiendo de la condicion se definió una lista de hospitales para casos complejos y las rutas y procedimientos para posibles traslados", aseguró Xiomara Badilla, jefa de epidemiología de la Caja.
Badilla, aseguró que además se hizo una inversión en equipamiento y trajes de protección para el personal de salud según lo que recomiendan las organizaciones internacionales.
Además según Trejos en los aeropuertos se ha venido trabajando con autoridades de Migración y líneas aéreas para definir planes de acción, así como espacios en caso de que sea necesario recibir a una persona procedente de uno de los cinco países donde hay presencia del virus y mantenerlos aislados del resto de viajeros mientras se hacen entrevistas o revisiones médicas.
La encargada de Vigilancia, añadió que se elaboraron protocolos de traslado con la Cruz Roja.
Según Trejos también se solicitó a Migración que esté notificando el ingreso de viajeros procedentes de los países con el virus (Sierra Leona, Guinea, Liberia, Nigeria y Senegal) con el fin de realizar abordajes oportunos mientras estén dentro del periodo de incubación del virus.
Donde sí existen debilidades en el control, según lo reconoció Trejos, es en los puestos terrestres, sobre todo por el ingreso de personas ilegales que no pasan por ningún tipo de oficina migratoria .
"El problema más serio que se nos está presentando en la frontera Sur es la entrada de personas ilegales, que muchas veces burlan el paso migratorio y son captadas posteriormente en retenes de Fuerza Pública, por ejemplo la semana antepasada tuvimos cinco africanos que se detectaron en Jacó en un retén, entonces inmediatamente del retén comunicaron al área rectora y se coordinó con la Caja para la valoración de los pacientes", comentó Trejos.
Sin embargo, la encargada de vigilancia, aseguró que para ébola específicamente es menos probable que ingrese un paciente en esta condición por esa vía, porque estos migrantes son personas que desembarcan en países sudamericanos y de ahí empiezan a transitar por tierra, muchas veces a pie y eso hace que para cuando llegan a Costa Rica, ya tengan varios días de estar en ese proceso de migración, por lo que si tuvieran el virus al llegar al país ya deberían tener síntomas y por enden deberían consultar algún servicio de salud.
La especialista aseguró que desde la alerta emitida el mes pasado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya se han ejecutado una serie de acciones que incluyen la revisión de la documentación técnica brindada sobre esta enfermedad, participación en videoconferencias internacionales, así como la actualización y revisión de los protocolos de bioterrorismo que ya fueron enviados a los servicios de salud.
Trejos aseguró que el laboratorio de referencia en el país Inciensa, no cuenta con la capacidad para procesar muestras de casos sospechosos, por lo que este centro se encargaría únicamente de hacer el embalaje adecuado y remitir las muestras al Centro de Control de Enfermedades (CDC) de Atlanta.
Estados Unidos confirmó el pasado miércoles el diagnóstico del primer caso importado en América.
Se trata de un hombre que viajó de Liberia a Texas (sur de Estados Unidos) y que se convirtió en el primer paciente a quien se le diagnostica ébola fuera de África, él comenzó a presentar síntomas el pasado 24 de setiembre.
El virus de ébola solo es contagioso si se tiene contacto con fluidos de la persona enferma una vez que esta presenta síntomas. Es decir no hay contagio durante el período de incubación que es de 21 días.
La fiebre que provoca se manifiesta con hemorragias, vómitos y diarrea.
Según la OMS la forma de ingreso más probable de una persona con ébola a un país, es por medio de aeropuertos.