La contaminación con bromacil, un agroquímico prohibido en Costa Rica, vuelve a dejar sin agua a una comunidad entera.

En esta ocasión, los afectados son los pobladores de Los Llanos de Aguas Zarcas, en San Carlos, Alajuela, unas 2.000 personas en total.

Según confirmó Armando Montero, presidente de la Asada a cargo del pozo de agua, el Ministerio de Salud clausuró la noche de este lunes el sistema que brindaba agua potable.

Se trata de una de las nacientes de la Asada de Santa Fe de Aguas Zarcas, de la cual dependen 500 abonados.

Montero confirmó que recibieron estudios donde se concluye que el agua está contaminada con en ese herbicida; el mismo que contaminó, en julio del 2018, tres nacientes en Río Cuarto, también en Alajuela.

Desde el martes, los vecinos reciben agua en cisternas.

El director del Área Rectora de Salud, del Ministerio de Salud, en Aguas Zarcas, Dionisio Sibaja Anchía, confirmó vía telefónica la situación, que calificó de “altísima prioridad” en su atención.

Sibaja explicó que desde julio del 2018, y por orden presidencial, diferentes instituciones trabajan de forma conjunta en un plan único con el fin de garantizar de que no aparezcan más fuentes de agua contaminadas con esa y otras sustancias químicas.

En un monitoreo preventivo de las fuentes de agua no contaminadas fue en donde se encontró la sustancia en el pozo más importante para la Asada de Los Llanos.

La contaminación sobrepasó la norma permitida, pues se encontró presencia de bromacil en cantidades de 0,34 microgramos por litro de agua, cuando la norma lo que permite es un máximo de 0,1 microgramos por litro.

La medida inmediata que se tomó, dijo Sibaja, fue sacar de operación el pozo. Posteriormente, garantizar al suministro de agua potable, para lo cual se ha recurrido a la distribución con cisternas y a la ubicación de tanques en puntos estratégicos, como las dos escuelas, el colegio y el Ebáis.

Adicionalmente, se logró un acuerdo con la Asada de San Francisco de La Palmera, para interconectar temporalmente uno de sus pozos con Los Llanos, con el fin de garantizar los 11 litros por segundo de agua que requieren estos 2.000 lugareños para sus actividades diarias.

Está en proceso todavía decidir cuál será el tratamiento que se le dará al pozo contaminado o si se buscará una nueva fuente de abastecimiento de agua potable. Esto, aclaró Sibaja, es competencia directa del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).

La Nación está a la espera de las reacciones de la presidenta del AyA, Yamileth Astorga, quien se encuentra en sesión de Junta Directiva.

No es el primer evento

En junio del 2017, el decreto N° 40423-MAG-MINAE-S, emitido durante el gobierno de Luis Guillermo Solís, prohibió el uso del Bromacil en el país, al considerar que tiene un alto potencial de contaminar acuíferos que eventualmente puedan ser utilizados para suministro de agua potable.

Maura Mora, vecina de la comunidad, no ocultó su preocupación; sobre todo, teme que hayan estado consumiendo el líquido desde hace tiempo y que sea hasta ahora que se enteren de su contaminación.

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“Estamos muy preocupados por la contaminación del pozo estrella de nosotros, que es el de Los Llanos, que tiene una producción muy alta. Más de 2.000 personas están ahí, con dos escuelas, un colegio, un Ebáis, y que de un día para otro nos diga la oficina de AyA que tenemos que cerrar el pozo y buscar las alternativas para resolver la problemática”, comentó Monteo.

En el pasado, este producto fue muy utilizado en plantaciones piñeras para el combate de las malas hierbas.

En el caso de Los Llanos, no trascendió de dónde proviene la sustancia que contaminó el agua.

Otros eventos en los que se ha reportado el uso de bromacil se registraron en abril del 2016, cuando el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) ordenó el cierre preventivo del sistema de suministro de agua para 4.400 personas, tras detectar la presencia de esa sustancia en seis de siete nacientes del poblado de Veracruz, en Pital de San Carlos.

Ese mismo año, pero dos meses después, la Fiscalía Agrario Ambiental allanó una piñera por sospechas de que habría contaminado nacientes que abastecen a una población de 3.500 personas, también en Pital.

En julio del 2007, trascendió la situación que enfrentaban unas 6.000 personas de las comunidades de El Cairo, Milano, La Francia y Luisiana, en Siquirres, Limón.

Según una denuncia de AyA, esa población consumía agua contaminada con plaguicidas; entre los encontrados en ese momento en nacientes y tanques estaba el bromacil.