Cerca de 500 ciclistas hicieron rodar sus bicicletas, este domingo en Cartago, para exigir respeto en las calles y homenajear a José Ricardo Carmona, quien ocho días antes falleció a un kilómetro de Puente Negro, en Orosi, atropellado por un conductor borracho.

El domingo 21 de febrero, Carmona Mora, de 38 años, disfrutaba de su pasión, rodar en bici por Orosi, cuando lo atropelló un conductor, de apellidos Amador Ramírez, de 23 años.

Ricardo Carmona era empleado del Banco de Costa Rica (BCR) en Cartago y, aunque es oriundo de Limón, desde hacía varios años que vivía en Agua Caliente de Cartago.

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Hagámonos sentir

Junto con varios grupos de ciclistas de todo el país, Randall Gómez organizó la actividad de manifestación y homenaje, bajo el lema “Hagámonos sentir”, en honor a José Ricardo y a todos los ciclistas que han perdido la vida en carretera.

“Soy un ciclista recreativo y, además del dolor que sentimos por lo que le ocurrió, queremos hacer sentir bien a su familia en estos momentos. Nosotros, como ciclistas, tenemos que hacernos sentir en carretera, debido a los ataques y amenazas que estamos viviendo por parte de los conductores. Queremos y pedimos el respeto del metro y medio (entre automóviles y bicicletas), porque en Costa Rica hay una gran cantidad de ciclistas que aman ese deporte”, comentó Gómez.

Convocados a través de todo el país por medio de las redes sociales, con el apoyo de varios colectivos nacionales, llegaron a la cita pedalistas de Cartago, Heredia, Alajuela, Limón, Desamparados, Curridabat, para una participación estimada en más de 500 ciclistas.

El encuentro de los pedaleros estuvo en las ruinas de la iglesia de Santiago Apóstol, en el centro de Cartago. Luego, se dirigieron hasta Paraíso; allí, la familia de Carmona estaba frente al estadio “Quincho” Barquero, esperando la masiva caravana.

El recorrido continuó por el mirador de Ujarrás, la represa de Cachí, para dar toda la vuelta al Valle de Orosi. En el lugar donde Carmona perdió la vida, se hizo un homenaje y se dijo una oración, con un minuto de silencio y un minuto de aplausos.

Luego, los ciclistas continuaron por las Cóncovas y regresaron nuevamente a las ruinas de Cartago, en un recorrido que tardó aproximadamente 3 horas y media.

Llamado a la conciencia

Ólger Paniagua y su hija Amanda, de 2 años y 8 meses, viajaron desde Alajuela para participar en la actividad. La pequeña estaba en pie desde las 5:30 a. m. para trasladarse hasta Cartago.

“Vinimos para hacer un llamado a la conciencia social de que las calles ahora están muy duras y no hay respeto para el ciclista. No tenemos suficiente espacio y el que tenemos nos lo están quitando; los carros no quieren compartir la vía. Amanda siempre viaja conmigo en la bici y hemos ido a lugares como al volcán Poás, a Grecia y Palmares y hoy, como siempre, viene bastante entusiasmada”, contó Paniagua.

Laurens Paniagua Sánchez llegó desde San Rafael de Oreamuno. “Tengo cinco años de ser ciclista y comprendemos el dolor de esta familia, porque pasamos mucho tiempo en carretera y nos esperan en casa. Tenemos que hacernos sentir en las calles, porque muchas veces los conductores no nos respetan”.

“Hace poco un camión me golpeó con el cajón, me destapó y me despedazó la bicicleta y se dio a la fuga, pero eso no importa, porque lo que importa es que sigo adelante y con vida. Queremos respeto porque también tenemos derecho de circular”, comentó.

Davis Zumbado, Valeria Ramírez y Ana Rojas, de Paraíso, Cervantes y Pacayas, respectivamente, se pusieron de acuerdo para ser parte de esta caravana. Iban bien preparados y llevaban a sus espaldas globos negros, luego del llamado en redes sociales.

“Venimos por el accidente que pasó con el muchacho y queremos acompañar a la familia en su dolor. Ese día fue él y no se sabe si uno puede ser mañana, por eso estamos aquí solidarizándonos con ellos. Tratamos de salir todos los días en bicicleta o por lo menos los fines de semana. El año pasado me golpeó un bus de Transtusa y me tiró al caño con todo y bicicleta, en Caballo Blanco. Yo quedé inconsciente y me llevaron al hospital”, contó Rojas.

Familiares a ciclistas: ‘Tengan mucho cuidado’

Los padres de José Ricardo, Noemy Mora y José Antonio Carmona, recibieron a la caravana, junto con otros familiares y la novia del ciclista fallecido, Rosita. Los papás de Ricardo viven en Limón, pero se mantuvieron en Cartago toda la semana.

“Estamos muy agradecidos con todo el apoyo que nos han dado en todo el país. No tenemos palabras y también estamos muy contentos por el apoyo. A los ciclistas queremos decirles que los apoyamos y que tengan mucho cuidado y a los que andan en automóvil que por favor los cuiden y respeten porque ellos andan haciendo un deporte. Mi hijo tenía más de 10 años de andar en bicicleta y, si no hacía otro deporte, los fines de semana se iba andar en bicicleta”, recordó Noemy Mora.