Chihuahua es uno de los estados donde aumentó el número de mujeres que dirigen departamentos de Policía debido a que los hombres los rechazan por miedo.
De acuerdo con la Procuraduría (fiscalía) local, Hermila García Baeza, secretaria de Seguridad Pública del municipio de Meoqui (21.000 habitantes), “murió al ser emboscada por pistoleros en una carretera” de la zona.
El cuerpo sin vida de García Baeza, abogada que tenía un mes en la jefatura de la Policía, quedó tendido a un lado de su automóvil, añadió la Fiscalía.
La funcionaria era soltera, sin hijos y era la primera vez que se desempeñaba en ese puesto.
La jefa policial fue asesinada alrededor de las 7:00 a. m. del lunes, cuando salía de su domicilio rumbo a la estación policial de Meoqui, comunidad dedicada a la agricultura y localizada en la zona central de Chihuahua.
Sus familiares reclamaron a las autoridades que ella viajaba sin ningún tipo de escolta policial cuando fue atacada por varios sujetos en un auto.
Este distrito mexicano es considerado el más violento por las disputas entre carteles de las drogas por el control de las rutas hacia Estados Unidos, principalmente en Ciudad Juárez, fronteriza con El Paso, Texas.
En otras dos localidades cercanas a Juárez, en Villa Luz y El Vergel, mujeres fueron elegidas como responsables de la seguridad.
No es la primera vez que el narcotráfico mata a mujeres de las fuerzas de seguridad. En 2008, fue asesinada la directora administrativa de la policía en Ciudad Juárez, Silvia Molina.
Los soldados encontraron durante el fin de semana los cuerpos de 19 hombres y una mujer enterrados en 12 fosas en el poblado de Puerto Palomas, al otro lado de Columbus, Nuevo México.
Los militares informaron a la Policía para que esta controlara la excavación de las fosas, detalló el procurador del estado de Chihuahua, Jorge González.
Ese mismo mes, los cadáveres de 18 hombres que fueron secuestrados en Acapulco fueron encontrados en una fosa común fuera de la ciudad.