Seúl. AP y AFP. Corea del Sur ingresó ayer en el selecto club de potencias espaciales asiáticas junto a China, India, Corea del Note y Japón, al lograr colocar en órbita un satélite para captar radiaciones cósmicas.
Funcionarios surcoreanos indicaron que la puesta del satélite en órbita se hizo exitosamente.
El triunfo surcoreano se produjo pocas semanas después de que Corea del Norte procedió a un lanzamiento espacial exitoso , que fue condenado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El cohete de 140 toneladas Korea Space Launch Vehicle (KSLV-I), de concepción rusa-surcoreana, despegó ayer de una plataforma de lanzamiento del Centro Espacial Naro, sito en la población costera de Goheung.
Minutos después del lanzamiento, las autoridades de ciencias dijeron que el proyectil colocó en órbita un satélite de observación.
El lanzamiento fue la culminación de años de esfuerzos por parte de Corea del Sur –la cuarta economía más grande de Asia– para avanzar en su programa espacial y consolidar su posición como una potencia tecnológica, cuyos semiconductores, teléfonos multifuncionales y automóviles tienen fuerte demanda global.
El programa de cohetes de largo alcance de Corea del Norte, por el contrario, ha generado temores internacionales de que Pionyang está cada vez más cerca de desarrollar misiles nucleares capaces de atacar a los Estados Unidos.
El satélite STSAT-2C está destinado a recoger datos sobre las radiaciones cósmicas durante un año, según responsables del programa espacial surcoreano.
“El cohete colocó victoriosamente el satélite científico en órbita”, declaró a la prensa el ministro de Ciencias, Lee Ju-ho.
Corea del Sur aspira a desarrollar de aquí al año 2021 un cohete de tres pisos con tecnología 100% nacional, capaz de transportar una carga de 1,5 toneladas.
Intentos fallidos. El lanzamiento había sido postergado en octubre y en noviembre debido a problemas técnicos en la primera etapa rusa y la segunda etapa surcoreana.
Los dos primeros intentos habían fracasado y lograr el tercero era vital para Corea del Sur pues se trataba del último intento con cooperación de Rusia. En el 2009, el cohete había alcanzado la órbita prevista, pero un defecto impidió el despliegue del satélite, mientras que para el 2010 el proyectil había estallado en pleno vuelo.
Las ambiciones espaciales de Corea del Sur fueron durante mucho tiempo frenadas porque EE. UU. temía una carrera armamentista en la península coreana.
Irónicamente, fue la vecina Corea del Norte la que ganó la carrera espacial, al lograr colocar el 12 de diciembre pasado un satélite en el comos.