También se conoció ayer que la policía mexicana investiga si 18 cadáveres hallados en una fosa cerca al balneario de Acapulco corresponden a un grupo de turistas secuestrados allí hace un mes, tras la publicación de un video en YouTube donde sus supuestos asesinos admitían el crimen.
La fosa fue descubierta el martes tras “una llamada anónima que reportaba dos individuos muertos”. Cuando la policía llegó “encontró sobre uno de ellos un un mensaje que advertía que en las inmediaciones había un enterramiento clandestino”, dijo ayer David Sotelo, procurador (fiscal) del estado de Guerrero.
Sotelo dijo que los dos primeros cadáveres parecen corresponder a dos personas que aparecen en un video difundido en YouTube, en el cual admiten haber asesinado a los turistas por órdenes de un jefe del narcotráfico.
“Las personas que aparecen allí, supuestamente confesando, al parecer son los mismos que encontramos muertos después de la denuncia”, señaló.
Sotelo agregó que se pidió a familiares de los secuestrados que viajen a Acapulco (sur) para ayudar en la identificación, aunque insistió en que las afirmaciones del video deben ser analizadas con cuidado, sin olvidar que provienen de un grupo interesado en acusar a sus enemigos.
“Los agentes creen que este túnel pertenece a un importante cartel de la droga mexicano”, dijo la portavoz de la Agencia de Inmigración y Aduana estadounidense (ICE), Lauren Mack.
“Este es uno de los decomisos más grandes en la historia de Estados Unidos” y el mayor en cantidad realizado en un túnel fronterizo, indicó Mack.
El miércoles las autoridades anunciaron el decomiso de más de 20 toneladas del lado estadounidense en la frontera del sur de California con México, mientras militares mexicanos decomisaron por su lado 4,5 toneladas de la hierba.
En un operativo nocturno realizado en Otay Mesa, San Diego (unos 200 km al sur de Los Angeles), se halló la salida de un túnel de unos 550 m de largo que atravesaba por debajo de unos almacenes hasta una localidad en Tijuana.
Los oficiales hicieron el hallazgo tras percatarse de un trailer sospechoso en una bodega en Otay Mesa (San Diego). Al detener a los dos hombres en el vehículo, encontraron 10 toneladas de marihuana en el trailer. Luego buscaron en el almacén de dónde habían visto salir el vehículo con los dos detenidos y encontraron otras 16 toneladas y descubrieron el túnel al que se accedía a través de un closet.