Roma. El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, superó este martes la confianza del Senado, pero perdió la mayoría absoluta, con lo que su gobierno sale notablemente debilitado para lidiar con la pandemia.
Con 156 votos a favor y 140 en contra, sobre los 161 necesarios para la mayoría absoluta, el gobierno de coalición entre el Movimiento 5 Estrellas (M5E, antisistema) y el Partido Democrático (PD, centro-izquierda) evita su caída por ahora.
Conte perdió el apoyo del pequeño pero clave partido Italia Viva del ex primer ministro Matteo Renzi, quien se abstuvo junto con otros 16 senadores.
Su ejecutivo, apoyado en una mayoría relativa, resulta ahora muy vulnerable a los ataques de la oposición de derecha en un momento difícil para el país, azotado por la pandemia que se ha cobrado la vida de más de 82.000 personas.
El jefe del ejecutivo, quien superó ampliamente el lunes la confianza de la Cámara de Diputados, no deberá renunciar a su cargo tras la votación ajustada en el Senado, ya que las normas le garantizan gobernar con una mayoría relativa en esa sala.
El conteo estuvo marcado por las protestas y demoras debido al cierre de la votación antes de lo previsto, por lo que la presidencia del Senado tuvo que verificar los datos.
Desde 1946, Italia ha tenido 29 primeros ministros y 66 gobiernos.
Giuseppe Conte gobernó inclusive primero con una coalición entre los antisistema del M5E y la derechista Liga, de junio del 2018 a setiembre del 2019, para después formar un nuevo gobierno con el M5E, el PD y otros partidos más pequeños como Italia Viva de Renzi.
“Sin los números suficientes me voy a casa”, había advertido antes de la votación Conte, acusado por la oposición de ofrecer cargos a los tránsfugas para mantenerse en el poder.
“El resultado de esta votación de todos modos no pone fin a la crisis” política de Italia, comentó Wolfgango Piccoli, de la consultora Teneo, poco antes de la votación.
“Será difícil para una coalición tan débil y compleja sacar a Italia de la crisis económica más profunda que atraviesa desde la Segunda Guerra Mundial en medio de una pandemia”, agregó.
‘La hora de la verdad’
“Llegó la hora de la verdad”, tituló horas antes el diario La Repubblica, mientras el influyente Il Corriere della Sera reconoció que se trata de un momento “difícil” para un ejecutivo que deberá tomar decisiones de gran envergadura.
“Es muy probable que Conte obtenga la confianza también en el Senado. Lo que no se sabe es con cuántos votos, ya que probablemente no logre la mayoría absoluta de 161 votos. Pero eso no es esencial para la supervivencia de un gobierno”, expresó previamente Giovanni Orsina, politólogo de la Universidad Luiss de Roma.
"En ese caso será un gobierno muy frágil", advirtió.
Ese escenario complica el liderazgo de Conte ante una Italia que debe encarar una serie de desafíos importantes, desde presidir este año el G20 hasta determinar en los próximos meses el destino de los más de 209.000 millones de euros que recibirá de la Unión Europea (UE) para el gigantesco plan de reconstrucción del país tras la pandemia.
Los aliados de Conte han pasado los últimos días negociando y contactando senadores independientes y tránsfugas de otros partidos dispuestos a apoyarlo.
El lunes, en la Cámara de Diputados, obtuvo el apoyo de una diputada de Fuerza Italia, el partido de centro de Silvio Berlusconi, la cual resolvió votar a favor del gobierno ante la emergencia económica, social y sanitaria del país.
Un tema que debería movilizar a buena parte del Parlamento, entre ellos a la senadora vitalicia Liliana Segre, de 90 años y superviviente del Holocausto, quien confirmó su presencia pese a que los médicos le han desaconsejado viajar.
“Es cierto que la historia de Italia está marcada por los gobiernos minoritarios, pero el país nunca había enfrentado una crisis social y económica tan dramática”, recordó este martes en un editorial Il Corriere della Sera.