Colombiano llenará puesto que dejó vacante Dall’Anese

De este modo, el colombiano ocupará el puesto que dejó vacante el costarricense Francisco Dall’Anese, quien fue nombrado al frente de la Cicig en 2010.

Velásquez fue magistrado auxiliar de la Corte Suprema de Justicia de Colombia, donde coordinó investigaciones de alto nivel sobre los vínculos entre los grupos paramilitares y cargos públicos de su país, señaló un comunicado del portavoz de Naciones Unidas.

Además, tiene “amplia experiencia” en la investigación y persecución de crímenes en la Fiscalía General de Colombia y como director regional de la Fiscalía en el departamento de Antioquia, añadió la nota del Secretario General.

El colombiano ha investigado a unos 60 congresistas de su país vinculados con paramilitares.

Mientras, el presidente del país, Otto Pérez Molina, comentó que aceptaron al colombiano porque “los antecedentes son de primera, así que no teníamos objeción”.

“Es un magistrado que ha tocado casos importantes, y viene por dos años a terminar el período de cierre de la Cicig. Deben trabajar para trasladar las capacidades al Ministerio Público (Fiscalía)”, consideró Pérez Molina.

Dall'Anese dejará el cargo oficialmente el próximo lunes, tras dimitir a finales de mayo pasado, y volvió a Costa Rica el pasado fin de semana, para tomar unos días de vacaciones antes de que concluya su mandato.

El exfiscal costarricense estuvo durante tres años al frente de la Cicig, una institución de las Naciones Unidas que se instaló en 2007 con el fin de contribuir a investigar a los grupos clandestinos de seguridad y combatir al crimen organizado en el país centroamericano.

Dall'Anese se marcha distanciado de la cúpula empresarial, que lo acusó de extralimitarse en declaraciones sobre el juicio contra el exdictador guatemalteco Efraín Ríos Montt, pues criticó la anulación de la sentencia a 80 años por genocidio.

Retos. El nuevo comisionado tendrá la tarea de concluir la última etapa de la presencia de la Cicig en Guatemala, ya que el mandato aprobado por la ONU concluye en septiembre de 2015.

En los próximos dos años, la Comisión se deberá enfocar en transmitir sus capacidades de investigación al Ministerio Público y a la Policía guatemalteca.

La Cicig se instaló en Guatemala en 2007 y su primer comisionado fue el español Carlos Castresana, quien renunció en junio de 2010 y en su lugar fue designado por Naciones Unidas el exfiscal costarricense.

Desde que comenzó a trabajar esa Comisión, la impunidad en Guatemala se redujo del 93 % al 70%, dijo el 22 de agosto Dall'Anese en una rueda de prensa.