Bogotá. DPA. Las autoridades del departamento colombiano de Antioquia descartaron ayer la posibilidad de que sean rescatadas con vida entre 20 y 30 personas que quedaron sepultadas el lunes por un alud que cayó sobre varias casas y una carretera del noroeste del país debido a las lluvias.
“En este momento no hay ninguna posibilidad de que se encuentren personas sobrevivientes”, dijo el director de la oficina de Atención y Prevención de Desastres de Antioquia, John Rendón, tras señalar que el lugar podría ser declarado “campo santo” si los cadáveres no son encontrados.
La tragedia ocurrió en el caserío El Tambo, del municipio de Giraldo, cuando parte de una montaña destruyó cinco casas construidas en la falda y sepultó a personas que caminaban por la zona.
Lo sucedido. Un pequeño alud bloqueó la vía el domingo, por lo que los pasajeros de un bus caminaban sobre los escombros para pasar al otro lado, donde los esperaba un vehículo, cuando se produjo una avalancha de grandes proporciones que sepultó a entre 20 y 30 personas, según el alcalde de Giraldo, Luis Manco.
Se calcula que unos 100.000 m³ de tierra sepultaron medio kilómetro de la ruta que comunica a Medellín, la capital del departamento de Antioquia, donde queda Giraldo, con un sector de esa provincia que está en la región caribeña.
Cerca de 50 voluntarios y unos 130 socorristas de la Cruz Roja Colombiana están dedicados a la búsqueda de los desaparecidos con la ayuda de perros.
El gobernador de Antioquia, Luis Alfredo Ramos, dijo que las labores de rescate son “muy difíciles” por la gran cantidad de tierra y piedras que cayó de la montaña.