“Se produjo un incidente” en la primera etapa del cohete Zenit-3SL menos de un minuto después de su lanzamiento, según la sociedad rusa Energuia.
La empresa Sea Launch, contratada principalmente por Energuia y el constructor aeronáutico Boeing, llevó a cabo este lanzamientos desde el mar, cuyo objetivo es situarse lo más cerca posible del ecuador. No tiene nada que ver con el programa espacial ruso.
“Una situación anormal tuvo lugar. El motor de la primera etapa (del cohete) dejó de funcionar”, declaró el director de la sociedad Energuia, Vitali Lopota.
El cohete dejó de dar señales de vida “después de 40 segundos de vuelo”, lo que les hizo comprender que “la misión fracasó”, precisó Sea Launch en un comunicado.
“Se creó una comisión para establecer las causas de este incidente”, declaró una fuente de esta empresa que fabrica sobre todo bloques de aceleración para los lanzadores de este tipo.