Atenas. AFP Militantes propalestinos ocuparon ayer la Embajada de España en Atenas para pedir al Gobierno griego que levante la prohibición contra los barcos de la flotilla internacional de zarpar hacia Gaza, mientras dos barcos navegaban o se preparaban a zarpar hacia el territorio palestino.
“Vamos a continuar nuestras acciones, el Gobierno griego debe dar marcha atrás en su decisión de prohibir el zarpe”, comentó uno de los organizadores griegos de la flotilla, Dimitris Plionis.
Atrapados desde hace más de una semana por los obstáculos puestos por autoridades griegas, así como por averías imputadas a sabotajes israelíes, lo que Israel desmintió, los organizadores trataron ayer de retomar la iniciativa.
Según una fuente diplomática española, cuatro de los militantes propalestinos que participan en la operación iniciaron ayer a mediodía una “ocupación un tanto simbólica” de la embajada de España en Atenas, “para pedir al Gobierno español que presione a Atenas a autorizar el zarpe de la flotilla”.
Uno de los militantes, Santiago, indicó anteriormente que unas 30 personas ocupaban la embajada, reclamando la salida del barco español “Gernika”, anclado en Creta. “Hemos decidido permanecer en los locales hasta entonces”, agregó el activista.
Los militantes desplegaron una bandera palestina en uno de los balcones de la embajada.
Otro barco de la flotilla internacional para Gaza , el “Juliana", se preparaba ayer para zarpar desde el puerto de recreo de Alimou, cerca de Atenas, indicaron los organizadores, sin precisar si se trataba de una acción simbólica o un intento de desafiar la prohibición griega.
Anteriormente, en la mañana, un barco francés, el “Dignité Al Kamara”, que no estaba inscrito como parte de la flotilla, anunció que eludió la vigilancia griega, y tras abandonar las aguas territoriales griegas navegaba hacia territorio palestino.
Una delegación “pedirá una protección” al ministerio francés de Relaciones Exteriores. Ayer, las autoridades francesas reiteraron su oposición al viaje.
Grecia, que desde hace un año ha consolidado sus relaciones, en particular económicas, con Israel, justificó su prohibición, impuesta el viernes, en la necesidad de “proteger a los pasajeros”, luego de que el Estado judío amenazó en varias ocasiones con utilizar la fuerza contra la operación.