“Nadie se va endeudar 20 años si no tiene un panorama claro, pese a que los créditos para vivienda son los que tienen el porcentaje de morosidad más bajo del país. La gente cuida su casa porque es la inversión de su vida”.
Jaime Molina
Presidente de la Uccaep
“Vivienda, agro y comercio han sido poco dinámicos durante el primer semestre del año, pero durante el 2012 tampoco tuvieron un crecimiento fuerte dentro de nuestra cartera de crédito. Hay otros que estuvieron tímidos como la industria”.
Bernardo Alfaro
Subgerente Banco Nacional
El crecimiento del crédito bancario para vivienda tiene cuatro meses estancado, pues desde marzo y hasta junio anterior, reportó variaciones interanuales menores al 1%, según datos de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
La información, elaborada por el ente supervisor tras solicitud de La Nación , muestra que en ese periodo se agudizó la desaceleración en el crecimiento de los saldos de los préstamos al sector, un proceso que comenzó a mediados del 2012.
El poco auge que está teniendo el saldo es relevante porque la cartera de vivienda es una de las más importantes del sistema bancario, ya que representa una cuarta parte del crédito total que otorgan, que en junio anterior era ¢10,1 billones (millones de millones), de acuerdo con Sugef.
Según banqueros y empresarios, la moderación del sector ocurre, primero, por la disminución en el ritmo de la actividad económica del país, y luego por la directriz que limita el crecimiento del crédito, dictada en enero anterior por el Banco Central.
Junto con vivienda, las otras dos áreas afectadas fueron el comercio y la agricultura que tras reportar tasas de variación interanual superiores al 20%, durante el 2012, ahora están por debajo del 5%.
Distinto ocurre con el crédito para consumo y servicios, que todavía mantienen un fuerte aumento.
Deglose. Los datos de Sugef revelan que son los bancos públicos los más golpeados por el menor ritmo de crecimiento del crédito de vivienda. De hecho, durante los últimos cuatro meses, reportan una variación interanual negativa que a junio cerró en 1,3%.
“El mercado se ha mostrado muy conservador, tanto así que las colocaciones totales al sector privado prácticamente no registran crecimiento”, dijo Rodrigo Ramírez, director de Gestión de Crédito del Banco de Costa Rica.
Para Jaime Molina, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), las familias no toman una decisión tan relevante como comprar casa en un ambiente de incertidumbre, y por eso posponen ese proyecto.
En el caso de la banca privada, el mayor deterioro ocurre en crédito para comercio, uno de sus pilares.
Gerardo Corrales, gerente de BAC San José, enfatizó que la actual situación es totalmente atípica y responde a la expectativa que tienen las personas y empresas.
De acuerdo con Francisco Llobet, presidente de la Cámara de Comercio, de mantenerse las restricciones actuales y el bajo crecimiento económico, se podrían frenar aún más las ventas del sector y afectar la generación de empleo.
Douglas Reynolds, gerente de Productos de Banco Lafise, dijo que si las condiciones cambian, durante el segundo semestre, la colocación de nuevos créditos crecerá.