El impuesto sobre las utilidades (más conocido como tributo sobre la renta) ganó terreno dentro de los ingresos tributarios en los últimos tres años.
En el 2010, la recaudación de dicho tributo en los primeros nueve meses del año representó un 24% del total de ingresos por impuestos y en el mismo periodo del 2012 avanzó a un 29%.
El ministro de Hacienda, Édgar Ayales, comentó que esta tendencia es positiva porque este es un tributo progresivo.
Dicho impuesto se cobra según el ingreso de las personas o las empresas. Así, si la empresa tiene más ganancias, paga más, por eso es progresivo.
Las declaraciones las dio el ministro ayer en una conferencia de prensa en la cual divulgó los resultados de las finanzas públicas hasta setiembre.
El jerarca explicó que en los primeros nueve meses del año el déficit del Gobierno alcanzó un 3,2% de la producción interna. Lo previsto para el año es de 4,5%.
Ingresos suben más que gastos. En general, los ingresos tributarios aumentaron 10,2% en los primeros nueve meses del año respecto al mismo periodo del año anterior, cifra congruente con el aumento que muestra la actividad económica, según Ayales.
Añadió que, aunque la actividad económica se ha desacelerado, estimó que este año la producción crecerá según lo estimado por el Banco Central (4,3%) o un poco más; incluso mencionó la posibilidad de crecer un 5%.
Los gastos totales, por su parte, aumentaron 9,7%, y según Ayales, lo llamativo es que las erogaciones en remuneraciones se han contenido.
Los gastos en salarios y cargas sociales aumentaron un 9% en el período mencionado.
Para el jerarca, la situación fiscal continúa bajo control y negó que sea el Ministerio Hacienda el culpable de los aumentos en las tasas de interés, pues este año la venta de bonos internos respecto a la producción es igual a la del año pasado (un 3,9% de la producción interna).